Or nah ➳ Jason McCann || +18

30. Delicious

Eran poco más de las 7:00 pm y en todo el día no había salido de mi habitación para no tener que soportar las incómodas miradas provenientes de Aaron y Derek.

No sabía cuánto tiempo se quedarían y no tenía a quién preguntarle, Mike había salido de emergencia después de que llegáramos del restaurante y al parecer se ausentaría una semana, así que se había llevado todas mis oportunidades de respuestas con él.

Tocaron la puerta de la habitación y Marta se asomó un poco.

-Señorita, el señor McCann me ha pedido que le diga que la cena estará lista en 15 minutos y debe estar presente.-Sonrío en mi dirección y asentí.

-Muchas gracias, estaré lista.-Sonreí de vuelta y cuando estaba a punto de cerrar la puerta, la detuve.-Marta...-Tal vez ella me podría dar respuestas.

-¿Si, señorita?-Frunció el ceño y entró de nuevo.

-¿Puedo preguntarte algo?-Susurré apenada.

-Si estoy en condición de responder, lo haré.-Me dio una sonrisa tranquilizadora y se acercó a mí.

Me hacía sentir un poco más tranquila tenerla a ella, incluso si no pudiera responderme nada, me consolaba pensar que alguien en este lugar no quería matarme.

-¿Por qué Jason y Aaron parecen tener tanta rivalidad?-Comencé a arreglar mi cabello un poco quitándole interés.

-Es una larga historia señorita, ellos solían ser muy unidos cuando eran jóvenes, yo he servido a la familia McCann desde que Jason era pequeño.-Se tensó.-Disculpe, el señor McCann.

-No tienes porque llamarlo señor en mi presencia.-Reí.-Y no me llames señorita, tan solo dime Dulce.-Sonreí y siguió hablando.

-Hace un tiempo, Jason tenía tan solo 15 años cuando su padre, Jeremy murió, todo el mundo creía que el negocio de la familia McCann pasaría a la familia Bass ya que Jason era muy joven y lo más viable era que el joven Aaron, que en ese entonces tenía 25 años, se encargara.-Me miró un poco incómoda e hice un gesto con la mano para que siguiera.

-La familia Bass tenía sólo una pequeña parte de New York, así que heredar California sería lo mejor para ellos, pero no fue así, el señor Jeremy le dejó todo a el joven Jason, así que el desde la corta edad de 15 años tuvo que hacerse responsable del negocio. Con el tiempo, la familia Bass se hizo de más territorio pero jamás pudieron superar a los McCann y al buen liderazgo de Jason. Tu llegada y sobre todo, tu embarazo, han puesto alerta a todos ya que jamás creyeron que Jason podría tener más familia que Mike, su mejor amigo de toda la vida quién es el único que está en el testamento del joven McCann.-Suspiró.

-Al menor él era el único, hasta ahora.-Concluyó e intenté analizar todo.

Si Jason no tenía más familia, entonces podrían matarlo a él y a Mike para quedarse con todo, pero ahora que yo había llegado y estaba embarazada, era un obstáculo.

-¿Qué hay de Derek?-Pregunté.

-El joven Derek siempre ha sido muy inteligente, tiene apenas 20 años y es el jefe de inteligencia no sólo de la familia Bass, también de otras familias que no tienen mucha influencia, pero que odian a los McCann. Tenga mucho cuidado con él, señorita.-Fruncí el ceño y siguió.-No tiene corazón, no le importa a quién tenga que destruir para lograr lo que se propone, ni siquiera Jason o Aaron son tan despreciables como él.-Me tensé al instante, no podía creer que ese chico fuera tan malo.

-¿Y sabes algo sobre mí? ¿Sabes cuál es el plan del que todos hablan?-Se tensó y sentí su incomodidad.

-No puedo hablarle de eso señorita.-Caminó a la puerta y la cerró antes de que pudiera decir cualquier cosa.