Verdades

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Los árboles pasan a una velocidad moderada a medida que avanzamos sobre la alfombra asfáltica de la carretera, permitiéndo detallar el pasaje a mi alrededor.
Veo el negro Ferrari de Lian rebasar la vieja furgoneta de Amber, Ágata y yo vamos con ella, mientras que Lian, Ean y Azael van en el ostentoso auto.

Después de un par de horas, y con el sol en picada bajo la montaña, pasamos el enorme letrero tallado en piedra con letras doradas que dice: Bienvenidos a Stowe.
Lian disminuye la velocidad del auto deportivo, para que Amber pueda rebasar, y asi guiarlo hasta mi casa en el pueblo. Mientras esta rebasa a velocidad lentísima, puedo ver el rostro de Azael darme una sonrisa pícara en el asiento trasero del coche, seguido por una fria mirada del Vampiro aterrador, provocando que clave la mirada a mis pies.

Los coches aparcan frente a la vieja y despintada casa de madera de mis padres, Amber, Ágata y yo bajamos del coche. Mientras que Lian y los chicos esperan pacientes en el deportivo.
Basta un golpe de nudillos sobre la puerta de tela para que mi madre salga apresurada, y al verme pone una gran sonrisa.

—Cariño ¿estas bien?— Mi madre da una mirada rápida afuera y descubre a Ágata parada tras de mi, esta le mira con un destello de emoción en la cara.

—¡Ágata que alegria!— murmura mi madre y avanza hacia ella.

Ellas se abrazan fuertemente y dan pequeños saltos juntas, mi madre posa sus ojos en La chica morena a un lado de Ágata.

—Mamá ella es Amber mi amiga de la universidad—

—Buenas noches señora Lazer, un gusto conocerle—Amber le sonríe a mi madre y le extiende su mano.

Mi madre y amber estrechan la mano.

—El gusto es mío hermosa, vamos adentro esta muy fría la noche. Se resfriaran, tu padre salió por cosas para hacer la cena, ¿tienen hambre?— musita mientras abre la puerta

—Mamá espera, vienen más personas con nostros— hablo a prisa.

Mi madre se detiene y vuelve a dar una mirada hacia la calle, Lian y los chicos bajan del deportivo, y enseguida a mi madre se le descompone la cara.

—¿Que es esto Chelsa?— La nota de molestia en la voz de mamá me hace saber que reconoce bien a los jóvenes.

Lo que me molesta un poco, ¿ella si se molesta por traerlos a casa? Pero ¿no pudo explicarme a mi lo que en realidad era? He pasando años pensando ¡que estaba loca!.

—Buenas noches, señora Poliakov— Lian no se molesta en intentar saludar a mi madre formalmente.

Ean la mira curioso junto a Azael que le está sonriendo bobamente.

—¿Es encerio Ágata? ¿Los Domenech en mi casa? —Mi madre le recrimina a Ágata, y esta no sabe que decir.

—Corrección señora Poliakov o ¿debo decirle señora Lazer? Yo no soy un Domenech, yo soy un Walk— Azael interrumpe el bochornoso encuentro, y todos lo miramos con cara de pocos amigos.

—Entren todos, en realidad mamá. la que tiene mucho que explicar eres tu, ¿No cres?— la acuso mientras paso a su lado sin mirarla.

Todos me siguen hasta que me siento en los desteñidos sofas de mi casa, y cada uno busca algun lugar del living para sentarse mi madre sigue de pie y junto a ella Lian, que observa mi casa con detenimiento.

Todos estan callados.

Hasta que rompo el silencio.

—Bien ¿Por que diablos me diste este dije mamá? ¿Sabias lo que implicaba? Yo solo me fui de casa con la intención de estudiar mamá, y me encuentro con cosas que ni sabia que existían, como un submundo, y unos dijes forjados en los cielos egipcios, ¡y quien sabe que cosas más! Ahora no puedo ni quitarme el maldito dije— grite con voz temblorosa.

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