Ansias De Sangre

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Lian Domenech

He tenido bastantes cosas con que lidar esta corta semana, mi vida estaba bastante "normal" desde hace un milenio.

En realidad, no se que odio más, ser inmortal carece bastante de sentido, siempre es lo mismo, repetir las mismas cosas, estar solo, hacer lo correcto, seguir las reglas de tu familia. Lo unico que cambia, es la ropa y que ahora estoy apunto de casarme con una mujer de belleza extraordinaria, pero que ni siquiera amo.
Y ahora estoy aquí en un hotel, frustrado por un maldito pedazo de metal, atado a una criatura que aparte de ser del clan contrario, es bastante complicada y sentimental.

—¡Vingo! ¿Que se supone qué haces aqui solo sobrino?—Azael interrumpe todos mis pensamientos, este es tan irritante cuando se lo propone.

—¿Que quieres? Y tu no eres mi tio— le contesto con enfado. Azael hace un mohin bastante afeminado llevándose una mano sobre el pecho finjiendose herido.

—Sabés, pensé, bueno pensamos, que tal vez dejarlos solos era más factible, y podrian mejorar su poca amabilidad entre ambos, bueno refiriendome a ti, por que Chelsy te tiene miedo— farfullo mientras daba vueltas a mi alrededor.

—Yo no tengo la culpa que mi sola presencia le imponga terror—Le doy una sonrisa sarcástica al estúpido de Azael que esta husmeando una carpeta de color rojo sentado sobre el buro de la recamara del hotel.

—Pues aquí el único que no está cooperando eres tu ¿lo sabias? Ean esta bastante entretenido con Amber allá abajo, y Ágata bastante comoda conmigo, la mujer es bastante guapa, y a pesar de qué me veo joven, tengo muchos más años que tú, si tu quieres amargarte ¡lo siento!— se encoge de hombros.

Azael se detiene frente a la cama dónde me encuentro sentado y escruta mi rostro, no le tomo importancia, hasta que capto bien lo que acaba de decir.

—La vidente ¿no esta con ustedes?— preguntó.

—¡Touche! sobrino, no ella esta en su recamara a tres habitaciones de la tuya, tentador ¿no?— me sonríe con picardia.

Ruedo los ojos y veo que mi celular comienzan a vibrar  desde la mesita de centro de la habitación, es Victorie, pero la ignoró, no estoy muy de humor para soportarla.

—Lian, tienes que alimentarte, tu cabello se torno completamente negro, y eso no es bueno más habiendo "medio humanas" con nosotros—me advirtió antes de salir de la habitación.

—No tienes que decirme nada, ellas no huelen rico pará mi, jamás tomaría alguna de esas criaturas para alimentarme de ellas—le espere molesto.

—Solo te pido que actúes responsable, sabes que la comida no nos basta por completo—

El estúpido de Azael me da la espalda y sale dando enormes zancada por la habitación, llevaba la carpeta roja que habia encontrado en el buro, tal vez era el menú del restaurant del hotel.

Camine hasta llegar a un espejo de media luna pegado a la pared que daba al baño, observe mi cabello completamente negro, y las ojeras aun más acentuadas bajo mis ojos.

Acune mis puños recolectando agua que bajaba del grifo y zambulli mi cara un par de veces, el agua helada despejó un poco mi mente artomentada, tome la tualla blanca colgada a un lado del lavamanos de cristal, y me seque.

Me recoste, sabía que no dormiria, en realidad los vampiros si podemos dormir pero no hay tal descansó, no lo necesitamos lo hacemos más por placer y otros ni se molestan en hacerlo.

Cuando cerre mis ojos, la imagen de sus verdosos ojos grandes vinieron a mi mente, haciendo que abra de golpe los mios, aturdido por el recuerdo, en definitiva, hoy no dormire, creo que haber estado con ella el dia de hoy me afecto bastante.

Tomo mi celular y noto varios mensajes, son de Victorie.

Victorie

Lian amor, ¿recuerdas que hoy es la prueba de tu traje? No me contestas las llamadas por lo que eh pasado con el sastre a hacerte una nueva cita el lunes. Te ama Tori.

Victorie

Lian ¿que pasa? Llame a tu madre y ni ella sabe nada de ti. ¿Donde rayos te metiste? No me gusta usar mis habilidades pero si no contestas pronto seguro te encontrare.

Esa fue la gota que derramo el vaso.

¿Esta mujer siempre sería asi?,  no me convenía que ella supiera en donde y con quien estaba asi que me limite a contestar sus mensajes.

Victorie, no hagas nada absurdo por favor, te cuento, acompañe a mi hermano Ean a unos asuntos que no son de tu incumbencia, Azael anda conmigo, si gustas puedes llamar a mi madre y ella te confirmara que estamos ausentes los tres, en cuanto a mi traje si no esta listo para el dia, tengo bastantes sin usar en mi closet.
No, hagas nada desesperado el lunes por la mañana nos vemos. Si necesito hablar contigo te llamo, ok besos.

Mis dedos dolieron de tan largo mensaje, yo no era de este tipo de vampiro, como Azael que se la pasa buscando a quien llevarse a la cama, o haciendo bromas a todo mundo, nunca se toma las cosas encerio, esto era bastante frustrante más la chica de aspecto oscuro, aunque en realidad era un simple ratón asustadiso.

Las llamas internas quemando mi garganta hizieron despertarme de mi letargo.

LA SED.

Mis manos comenzaron a temblar, sabía que si no conseguía pronto sangre, esto se tornaria bastante mal.

Las ansias de sangre empezaban a tomar control de mi cuerpo....

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