Loca Por El Vampiro

Preocupación

Shelina Lazer

—¿Que te preocupa amor? —Darius esta recostado en la cama de la habitacion que Ágata amablemente nos presto.

—Si y tu también deberias estarlo— refute.

—Creo exageras cielo— me miro con una sonrisa, lo que me hizo que le diera una mirada envenenada.

—¡¿Que?! Lian Domenech es un vampiro. ¿Entiendes? — mi voz se torno histérica.

—Yo soy un humano común, y tu nunca hiciste caso a tus padres, ¿como es que ahor pretendes que Chelsa salga tan recta y obediente a las reglas? —

Tome un cojín del sofa reclinable donde estaba y se lo lanze en la cara a mi esposo, Darius jamás le daria la espalda a Chelsa en sus desiciones asi fueran tan malas como esta.

—Eres imposible Darius Lazer—

Me senté sobre la cama y el se levanto para poner sus manos en mis hombros y darme un pequeño masaje que me relajo lo bastante.

—Ahora vuelvo bajare para traer un té y tranquilizarme— giré para verlo a los ojos, el chico aquel del que me enamore seguía hay en cada sonrisa suya. Lo bese — Te amo—

—Yo también te amo— contesto.

Camine despacio por las escalera debia ser de madrugada, camine hasta la cocina y para mi sorpresa Ágata estaba sentada en la mesa bebiendo cafe.

—¿Todo bien? — me pregunto con angustia

—Si, solo baje por té o algo que calme mis nervios— tome la cafetera

—También estoy nerviosa, ¿Cres que realmente benjamín este involucrado?—

—Espero que no Ágata, agradesco a mi padre que no permitiera que me desposara—  Recordar esa historia hizo que mi estómago se amargara.

—¿Encerio te gustaba?— preguntó.

—No pero mi madre lo veia apto para mi, aunque mi inclinación era más por Iván, hablemos de otra cosa ¿Si? —  desvíe la mirada avergonzada.

—Algún dia tu hija tendra que saber la verdad, no cometas los mismos errores Shelina—

—Lo se... Es que ese chico Lian me ha puesto mal— confese.

—¿Por Chelsa? ¿O por Iván? —

Por supuesto que por mi pequeña, tengo miedo a que la lastime, es un vampiro, un ser sin alma-

—Tranquila detrás de ese chico frío, esta el verdadero amor de nuestra niña, se que la ama lo he viso cuando su cuerpo se refleja en mis espejos, los he visto juntos e incluso...  dejó la frase incompleta lo que me puso nerviosa.

—Sea lo que sea que viste dinelo Ágata—

—La he visto con un bebé —musito

—¡No! Eso es imposible, tal vez el no sea su destino, tal vez su destino sea Mark—

—Shelina. Mark siempre ha querido a tu hija, mi sobrino es bueno pero no esta dispuesto a cumplir con el pacto si ella no le ama, y esta claro qué su corazón ya no es de el como cuando eran unos niños—

—Esta niña me volverá loca—

—Es igual a ti—sonrió.

Seguí bebiendo el café, mientras Ágata sacaba de su alacena un panque de chocolate.

—Esta delicioso come, prepare varias cosas para el camino tres bolsas con un poco de comida—

—Gracias Amiga, ¿por que tres bolsas?—

—Lian y Chelsa viajaran solos, al igual que Amber y Ean, Neffertari y yo vamos con Azael-

—Hummm—

—Amiga, No te pongas difícil Lian es buen chico, aunque no lo parezca, se que respeta mucho a Chelsa. No pasara nada entre ellos—

—Espero que ella también tenga prudencia, y sabes a lo que me
refiero—

Ágata sonrió pero no dijo más, di las gracias y camine de nuevo a la habitación Darius dormia plácidamente, mientras me senté en el sofá junto a una ventana, Chelsa era toda mi vida, no aceptaría tan fácil perderla, al haber escogido a Lian ella tendría que hacerse inmortal por lo qué una parte de ella cambiaría para siempre, cada vampiro convertido perdia parte de su esencia y carácter y eso me aterraba. La amo y no renunciare tan fácil.