Magia y Discordia [Discord x Twilitgh]

9.

Ya vimos las cosas desde la perspectiva de el Draconequus. Es momento de ver todo desde los ojos de nuestra pequeña princesa.

Twilight.

Me duele el pecho de solo recordar las palabras de Discord, el solo pensar que me utilizó solo para su propio bien.

¿Cómo no me di cuenta antes?, Estamos hablando de Discord por todos los ponys. Era obvio que él me traicionaria. El no dudó en traicionar a Fluttershy (su mejor amiga) en la pelea contra Tirek, que podría esperar yo.

Pero claro, yo, la pony que siempre se prepara para todo, la que siempre tiene distintas rutas de escape y soluciones a todo...

Termine siendo derrotada por alguien a quien vencí dos veces.

– Soy una idiota, que más podía esperar del dios del caos... –

Después de volar como una frenética por todo el castillo, termine en el jardín trasero. Justo en el mismo lugar donde Discord y Fluttershy estaban tomando el té.

La mesa con los utensilios seguían ahí, algunas galletas casi acabadas y un poco de té el cual ya estaba frío.

El sólo ver esa escena me irrita y no entiendo el porqué, siempre vi a esos dos tomar el té muchas veces, con sus típicas pláticas y códigos secretos de amigos. Pero eso nunca me importo... Hasta hoy.

Decidí irme del lugar, no me sentía cómoda aquí.

– ¡Princesa Twilight! –

Escuché aquella voz a lo lejos, me voltee rápidamente, encontrándome con una melena azul, qué era cubierta por una armadura dorada.

– General Flash, es un honor tenerlo por aquí en el castillo. –

– El honor es mío princesa Twilight. – Flash hizo una reverencia.

– ¿Qué te trae por aqui General Flash?. –

– Eh venido a dejar un recado de la princesa del reino de cristal para usted. –

– ¿Cadence? –

– Así es princesa. –

Sin más, Flash me entrego un pergamino con un listón rojo enrollado a su alrededor, con el sello del imperio de cristal. Por el momento decidí guardarlo, luego lo leería.

– Gracias por venir hasta aquí personalmente para entregarme este recado General Flash. –

– No tiene nada de que agradecer su majestad, siempre estaré dispuesto a venir personalmente hasta aquí solo para verla. –

Eso me sorprendió, Flash lo dijo de una manera tan natural, como si no fuera la gran cosa, pero eso me causo un pequeño sonrojo.

– No es necesario decir eso General Flash, además llámame Twilight, no me gusta que me hablen con títulos tan extravagantes. –

– Como usted ordene... Twili. –

Siempre mis amigas me llamaron algunas veces por ese nombre, la verdad no me importaba, ellas tenían el derecho de hacerlo, después de todo ellas son mis mejores amigas.