Magia y Discordia [Discord x Twilitgh]

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La alicornio corría por aquel jardín en busca de aquel hibrido,  el lugar era demasiado extenso, arboles tras arboles aparecían y cada vez estos eran más frondosos impidiendo la visibilidad. Se detuvo un momento para tomar aire, aprovechando y observando cada lado, era como si ya hubiese pasado por ese lugar varias veces, tenia esa sensación.

— No puedo ir tan lejos...

Retomo la carrera buscando a aquel macho híbrido causante de su felicidad diaria. Los árboles que impedían la vista poco a poco iban desapareciendo, dejando a la vista el cielo estrellado.

— ¿Esto es magia?...

La menor se detuvo y admiro como poco a poco el bosque iba esfumando se poco a poco convirtiéndolo en un jardín normal. Al desaparecer la magia la princesa noto que estuvo corriendo en círculos. Regreso otra vez al kiosko, lugar que iba desintegrándose poco a  poco.

— Discord... ¿Todo esto fue creado para mí?...

El techo del lugar ya no estaba y los soportes cada vez eran menos.

— No permitiré que tú esfuerzo sea en vano.

Lanzo un hechizo a la estructura, está lentamente volvió a su estado normal, siendo fortificada con algunas sogas florales.

— Esto hará que dure un poco más. Ahora Discord espérame...

Corrió entre los los arbustos a la misma dirección en dónde fue el mayor. Era momento de aclarar todo, de resolver las inquietudes y unir lazos. Era tiempo de dejar todo en claro.

•••

30 minutos corriendo, cansada y agotada por el exceso de magia que usaba para mantener el kiosko la habían agotado. A mitad del camino decidió volar para cubrir más terreno, pero su fuerza disminuía y sus alas no respondían de una buena manera, así que para evitar accidentes decido seguir galopando.

— Ya no puedo más...

Se recostó en la tierra cansada y desesperada, sus cascos flaqueaban, su mente era un lío. ¿Si Discord huyó? ¿Y si no vuelve jamás? ¿La abandonó?.

— Discord.... por favor... Te necesito...

Escondió su rostro en sus cascos delanteros y sollozaba mientras las lágrimas caían en el suelo, humedeciendo la tierra.

— Te necesito conmigo... Yo... Yo te...

Levantó el rostro aún con lágrimas y con la fuerza que le quedaba se levantó, tambaleándose un poco. Miro al frente y con una mirada determinada comenzó a dar pequeños pasos aumentando el ritmo de ellos.

— ¡Yo te quiero en mi vida!.

El dolor de sus patas eran un problema secundario, podría soportarlo, pero no soportaría el hecho de no estar junto al híbrido, no quería perderlo, no ahora que por fin tenía el valor.

—¡DISCORD!

Su garganta estaba seca, le dolía un poco, luego de esto bebería una buena taza de té con miel y un buen masaje acompañado sería una tarde ideal. Lo gracioso es que Discord estaba con ella, aunque esté estaba dentro de una tina de burbujas en dónde le hacían tratamiento a sus garras.

Aquello la hizo reír en su recorrido por el lugar. Una luz fue reflejada en su vista provocando que mirara en esa dirección. El sol estaba saliendo poco a poco, iluminando la oscura noche. Una silueta era visible entre ese brillo. La alicornio se detuvo derrapando y se dirigió a aquella silueta alta.