Lucha Incansable(LCDH2)

Capítulo 9

De camino a un lugar que no tengo la más mínima idea de lo que es, me permito pensar en mi padre, en lo que podría pasar si yo muriera, tal vez sería el desencadenante de la pasividad de mi padre y comenzaría la guerra contra los salvadores. Mis acciones pueden causar muchas muertes comenzando con la mía propia. Una lucha incansable hasta que ganemos o perdamos, pero no seríamos cobardes y nos someteríamos bajo el yugo de los salvadores.

Lo que estoy haciendo puede que tenga consecuencias sumamente altas —y no estoy hablando de mi posible muerte— donde el precio puede ser demasiado caro. Durante días he valorado todo tipo de posibilidades, e incluso la llegada de la guerra contra los salvadores, un hecho que si por mí fuera, ya hubiera iniciado desde el momento que se llevaron a los Dixon con ellos y mataron dos de los nuestros. Las posibilidades de que ganemos son inexistentes, somos pocos comparados con el ejército de salvadores que tiene Negan bajo su mando, y solo nosotros, los alexandriamos seríamos incapaces de hacer frente a los salvadores, por fuertes que seamos, nos falta gente en número y nos faltan armas.

Tal vez sí...

Un sonido me saca de mis pensamientos, lo primero que pienso es que hay un salvador dentro del camión, atajo la respiración y valoro mis posibilidades. Tal vez lo pueda atacar por sorpresa...no esa idea no me sirve puesto que no llevo armas conmigo —y tampoco hubiera sido una opción contando el sonido del arma a no ser que cuente con silenciador— y mi único cuchillo se lo di a Beth ya que ella había perdido el suyo.

Con mucho cuidado tratando de no revelar mi presencia tras las cajas, me asomo averiguando la identidad de la persona en el camión. Tengo que parpadear para asegurarme de que no estoy imaginando cuando distingo la larga cabellera castaña del hombre que nos condujo —Sin intención supongo— al peligro y a la perdía de dos amigos.

Observo a Jesus sentado en la entrada del camión, en sus manos distingo una botella de Whisky.

La tensión me abandona cuando lo observo beber, Paul o Jesús como se hace llamar, es el responsable de todo lo que nos sucedió. Tal vez no sea justo echarle toda la culpa a él, porqué fuimos nosotros los que accedimos matar a los salvadores pero si él no hubiera dicho nada...

Los ojos de Jesús se posan en mí, luce sorprendido y confundido al descubrirme entre las cajas, pero también un poco asustado.

- Mierda niño - dice no tan alto, solo lo suficiente para que yo le escuche - Casi me matas de un susto...

Salgo de mi sorpresa mientras frunzo el ceño. Abandono mi escondite comenzando a caminar por el camión.

- ¿Qué haces aquí?. - interrogo escuchando como mi voz sale enronquecida.

Los ojos azules de Jesús me miran curiosos mientras bebe de su botella de Whisky.

- Estaba por hacerte esa misma pregunta - dice cuando deja de beber - Ah tenía tiempo que no tomaba nada, estos desgraciados siempre se lo llevan todo...

Genial» pienso con sarcasmo «Está borracho».

- No has respondido a mi pregunta. - digo mientras trato de mantener el equilibrio ante los movimientos bruscos del camión de carga.

Bebe otro trago antes de lanzar la botella por las puertas abiertas del camión.

- Averiguar dónde está la base de los salvadores. - lo dice con calma mientras se levanta a por otra botella. - Supongo que haces lo mismo ¿No?.

Asiento, aunque no sea del todo cierto.

- ¿Tu padre te mandó?. - pregunta luego de unos minutos de silencio.