Mi estúpido vecino

🍃1- Un nuevo inquilino🍃

- Despierta Jisoo- dije llamando a su puerta por tercera vez en la mañana- al final llegamos tarde por tú culpa- dije haciendo énfasis en el pronombre tú.

Sin respuesta de su parte.

- Pues si no estas lista en 10 minutos yo me voy sin ti- dije dando media vuelta por el pasillo en dirección a mi habitación para terminar de prepararme.

Volvíamos de las vacaciones de Navidad con una sonrisa en los labios hasta que llegó el día de hoy, "¡¡vuelta al cole!!", como no paraban de repetir a los alumnos en los anuncios de televisión. Por el amor de los dioses ¿pero que mentira es esa de que volvemos felices y llenos de alegría? ¿Desde cuándo un niño tiene ganas de que le cambien un juguete nuevo por un montón de libros? ¡Desde nunca!

En fin, me compadezco de esos pobres a los que encima de madrugar como yo, les tocaba ir a clases por las que no tenían ni el mas mínimo ápice de cariño. Porque no padres, no, no existen asignaturas favoritas, existen asignaturas que sobrellevas mejor que otras porque por gracia de los dioses te cuesta menos comprender o te gustan algunas cosas de las que se dan pero ¿todo? permíteme que lo discuta.

Si soy yo, que estoy en la universidad dando algo que se supone que me debe de encantar y volver loca y aún así admito que hay cosas con las que no puedo tragar.

Estoy en primero de carrera de artes de la danza y la pintura, porque si, a falta de una complicación cojo dos y porque mi cuerpo y mi tiempo no me permite una tercera que sino cogería literatura.

Soy una enamorada del arte y la mayoría de sus maneras de expresarlo, leer, bailar, pintar, escribir....Y un millón de cosas más que por falta de tiempo no puedo practicar o intentar.

Tengo 20 años y hace 3 que me independicé. La vida en familia no ha sido lo mío nunca, básicamente porque nunca tuve una de verdad. Me llevo bien con mi hermanastro y creo que es un milagro, tiene 5 años, ya veremos cuando crezca. Un padrastro que discute contigo por cualquier gilipollez ¡Incluso por fútbol! ¡Pero si ni siquiera me gusta! Solo practico un deporte, baloncesto, y lo hago en mis ratos libres. Una madre que desea plasmar en mi todos sus sueños frustrados y encima sobreprotectora, nada peculiar que contar mas allá de quererme apuntar en uno de estos típicos concursos de miss, del cuál me libre de milagro gracias a mis amigos. Mi hermano era el único que se libraba y porque no entendía más allá de las series de dibujos.

Novio....sin señales de vida, se fue con la típica y cliché escusa del "no eres tu, soy yo". Claro que no era yo la que quería tirarse a su compañera de clase, no me va ese rollo.

Me até bien los cordones de mis Vans negras y me cogí la sudadera color tinto del ropero, me puse la maleta en el hombro derecho y emprendí camino.

- ¿Dónde vas?- dijo mi compañera de piso y mejor amiga con voz somnolienta saliendo de su habitación.

- A clases, por cierto, ya que no vas a primera hora date una ducha, tomate la pastilla "anti-resaca" y el desayuno que te he dejado en la cocina y vístete- dije numerando una por una todas las cosas que debía hacer antes de ir a la universidad.

-¿Quién me diría a mi que mezclar alcohol era malo?- dijo frotándose la cara con una mano mientras con la otra se sujetaba al quicio de la puerta para no caerse.

- La pregunta es ¿a quién se le ocurre mezclar?- dije para después mirar la hora que marcaba el móvil- arréglate y nos vemos en un rato- dije corriendo hacia la puerta sin esperar alguna respuesta de su parte.

No era fan de los primeros días de nada, son un amasijo de emociones mal controladas que salen a borbotones cuando menos te lo esperas. Algunas veces salían de manera que no había heridos y otras en las que todo parecía La matanza de Texas, acababa todo el mundo hasta arriba de mierda. ¿Qué día me esperaría hoy?