capitulo 6

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—Sube al coche. — El inconfundible acento ruso hizo a Meena rodar sus ojos.
—Me tengo que ir, Teena. — Colgando a su hermana, Meena se volvió y tuvo a
la vista el largo sedán negro, un Lincoln Town Car, por supuesto, porque a Dmitri le
gustaba viajar con estilo. —No quiero subirme, Dmitri.

La ranura del espacio que ofrecía el cristal tintado de la ventana no era
suficiente para que ella viera su hermoso rostro, pero podía imaginarlo, pelo oscuro,
ojos azules, y arrogantes, más allá de lo que podías creer. ¿No se imagino que su
motivo para dejar su casa aparecería?
—¿Cómo me encontraste? —
—Soy un hombre de muchos recursos, como tú deberías saber.
Sí, ella lo sabía, lo cual era el por qué ella huyó de él y cogió el primer avión de
regreso de Rusia. Una vez en casa, se imaginó que podría esperar un par de llamadas exigiendo su regreso. Lo que no esperaba era que él iba a seguirla.

Dmitri era también de la vieja escuela en la que, aparentemente, “un No” no
era tomado como una respuesta. Ni una sola mujer podría usarlo en cualquier caso. Y
por si alguien pensaba que había una cierta ironía en el “no” de Leo haciéndose de
rogar, mientras que el suyo había sido un “no” rotundo, cabe señalar que Leo era su
compañero. Dmitri era una aventura de vacaciones, una que ni siquiera había llegado al dormitorio.

Totalmente diferente.
Con Leo, ella sentía chispas. Hormigueos. Con Dmitri, meh, fue lindo, pero no
logro llegar a su corazón como un cierto ligre

—Tienes que dejar que me vaya, Dmitri, y seguir adelante. No voy a casarme
contigo.

—Lo harás. — Tanta convicción, y hasta trajo un poco de musculo para tratar
de demostrar su declaración. Un par de bestias salieron del coche. La orden de Dmitri fue, —No la lastimen, —lo dijo en voz alta.
Por favor. Si pensaba someterla a ella, debería haber traído más chicos. Como
el gorila –y en serio, pese a su evidente humanidad, tuvo que maravillarse de su
ascendencia– cuando quiso tomarla por su brazo, lo eludió, causándole que atrapara
solo aire. Ella, por su parte, no falló.
Lanzo su pie y golpeo al matón número uno en la rodilla. Soltó un grito de
dolor, pero antes de que pudiera vencerlo completamente, el segundo tipo se
abalanzo sobre ella. Ella se agachó por debajo de sus manos intentando agarrarla y
golpeo, su puño conectando con su diafragma. Le faltó el aliento. Ella no tuvo
misericordia y le dio un rodillazo en la ingle, al igual que al matón número uno cuando
hizo su siguiente movimiento.
Con un tintineo de campanas, la puerta de la cafetería se abrió, y con una voz
muy tranquila Leo dijo,
—Pon un dedo sobre ella, y te arrancaré el brazo y te pegare con el.
Cuando amenazaba, era adorable. Sobre todo porque, dado su tamaño y porte,
Leo probablemente podría.
El idiota no escucho. El matón fue a agarrar el brazo de Meena, y la curiosidad la hizo dejarlo en lugar de romperle los dedos.
¿Por qué defenderse ella misma cuando Pookie parecía decidido a venir a su
rescate?
Mientras que exteriormente parecía fresco y compuesto, una salvaje tormenta
se avecinaba en sus ojos cuando Leo gruño,
—Te dije que no la toques. — Crack.
Yup.
Había un tipo que no tocaría nada con ese brazo por un tiempo, y él probablemente acabaría ronco por la forma en que estaba gritando.
Marica.
En la distancia, sirenas gemían a la vida, y Dmitri ladraba órdenes,
—Entren en el coche, idiotas, — el intento de secuestro de los matones había fracasado.

Meena no se molestó en ver la velocidad del coche, no cuando ella tenía algo
mucho más importante que atender. Como un hombre que pensó que necesitaba ser
salvada. Cómo se reiría su papá cuando escuchara sobre eso. Su hermana, Teena,
suspiraría de lo romántico que era. Su madre, por otro lado, regañaría a Meena por
causar el caos una vez más.
En cuanto a Leo, quien tenía un formidable ceño fruncido, se lanzo hacia a él. Al
parecer, él la esperaba porque tenía sus brazos abiertos, ¡y la atrapó sin ni siquiera un
pequeño traspié!
Enredo sus piernas alrededor de su cintura, lo rodeo con sus brazos alrededor de su cuello, y exclamó,
—Pookie, estuviste genial. Me salvaste de esos grandes, hombres malos. Eres
como un caballero con armadura. — No era totalmente cierto. Llevaba una camiseta
de Fruit of the Loom negra lisa. Pero ella lo imaginaba totalmente en una de esas
camisetas de forma ajustada que Under Armourhacia especialmente que moldeaban
perfectamente su pecho.
Pensándolo bien, teniendo en cuenta lo que sería mostrar su impresionante
musculatura, tal vez debería dejar a su guardarropa en paz. No utilizaría nada que
provocara al público femenino con lo que no podía tener. También significaría menos
sangre que limpiar para ella si se atrevían a tocar.
—Yo no diría que te salve. Parecías estar haciéndolo bien por tu cuenta. —
Ella plantó un beso en sus labios y lo declaró,
—Mi héroe. —
La mayoría de los hombres podría haberse inflado en orgullo al ser comparado
con un héroe, o hundirse el suelo aplastados bajo su peso. Leo se quedó allí,
frunciendo el ceño en ella y luego en la distancia donde el coche había huido.

—¿Quiénes eran esos tipos? —
—Oh, esos eran sólo los hombres de Dmitri.
—¿Y quién es Dmitri? —

—El hombre con el que se supone iba a casarme. —

Y apareció Dmitri 😱😱😱😱😍😍😍😍

Nos leemos luego😜

Nos leemos luego😜

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Cuando Un Omega Se Rompe•||Saga El Orgullo Del Leon 3 ||•( Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora