Secretos Ocultos

Capítulo 21

Secretos Ocultos

Capítulo 21

Los celestes ojos brillantes de Holly me observan con completa naturalidad. Su expresión no demuestra absolutamente nada, luce tan inexpresiva que quiero que la tierra me trague ahora mismo por lucir todo lo contrario a ella.

Estoy sorprendida, y mis gestos faciales se encargan de informarle a todo mi alrededor cómo me encuentro. Hay veces que detesto ser tan transparente y tan fácil de leer, este es un claro ejemplo de ello.

—Holly —suelto con desconfianza.

Su mirada me escanea por completo, hasta puedo sentir que está quemándome con sus ojos detallistas y su expresión desinteresada.

—¿Qué tal todo, primita?

—¿Qué estás haciendo aquí? —siento el cuerpo de Smith acercarse más al mío, y por alguna razón, esa acción de su parte me brinda más seguridad.

Mi prima ríe y la observo aun con más confusión de la que ya cargo— Oh Brooke, por favor. Cómo si no supieras que hago aquí.

Frunzo mi ceño, y siento como Smith da un paso hacia el frente.

—No sé de qué me estás hablando.

Mueve su cabeza hacia ambos lados mientras su risa parece ser el único sonido que hay a mi alrededor.

Noto que su aspecto ha cambiado un poco. Lleva más maquillaje de lo normal, como si eso fuera posible, tiene una gran capa de sombra negra sobre sus ojos y sus labios están pintados de un color bordó tan oscuro que hasta luce como un violeta demasiado opaco. Su cabello está sumamente alisado y se encuentra recogido en una alta cola de caballo. Lleva puesta una falda demasiado apretada y un top que luce todo menos cómodo.

¿Qué ha sucedido con mi prima? Holly jamás hubiese alisado aquellos rizos tan hermosos y naturales que tiene. Ni tampoco utilizaría colores tan oscuros. La conozco demasiado bien y sé que las tonalidades oscuras son su peor pesadilla.

¿Holly estará viviendo una pesadilla?

—Por favor Brooke, no te hagas la ingenua. Ambas sabemos que nunca has jugado a ese papel y que eres más lista de lo que crees.

—Holland créeme cuando te digo que no tengo ni la menor idea de lo que estás diciendo.

Me observa con repleta seriedad y temo lo que sea que esté por venir. No comprendo a mi prima en este momento, no tengo ni la más pálida idea de lo que quiere ni de lo que piensa que se.

Siento como la mano de Smith se posiciona sobre mi brazo y aunque no pueda despegar mi atención de la rubia que se encuentra frente a mí, un escalofrío recorre mi cuerpo. Intento ignorar el verdadero sentido de este y afirmo en mi mente que es todo culpa del viento.

Que patética eres Brooke, ni siquiera puedes admitir que te gusta un mafioso.

—Sabes cuándo odio que me llames por mi nombre.

Elevo mi mirada hacia el cielo y vuelvo hacia ella en menos de un segundo.

—Sinceramente ya ni siquiera sé que odias y que no. Hasta temo no saber nada de ti —quiero encontrar alguna expresión en su rostro, algo que me de alguna señal de algo, pero cualquier tipo de búsqueda es innecesaria. Ella simplemente me observa con repleta seriedad—, ¿me dirás que está sucediendo?

—Pensé que me conocías bien.

—Eso creía hacer. Pero luego de verte estas últimas dos semanas actuar de esta manera me hace replantearme si realmente he llegado a conocer a la verdadera Holly.