Para Todos Mis "Fracasos Amorosos" (PAUSADA)

Capítulo 3: ¡Una Noche Llena de Locuras!

9 de la noche. A esa hora las personas responsables se estaban preparando para dormir, ¡Pero yo no tenía de responsable nada! Así que, mientras mis padres se estaban durmiendo, yo estaba preparándome para ir a ese bar gay.

En ese momento me estaba viendo al espejo mientras me secaba el pelo, en mi casa había un pasillo donde se encontraban las habitaciones de Sophie, la de Trevor y la mía, al final de ese pasillo estaba el baño, así que no tenía por qué preocuparme de que mis padres se despertaran por el ruido, ellos estaban durmiendo plácidamente en una habitación que estaba cerca de las escaleras, esa habitación tenía su propio baño así que tampoco se darían cuenta que me estuve bañando.

Mientras terminaba de prepararme, recordé que a pesar de lo loca que era mi vida y lo cómica que podía llegar a ser, estaba engañando a las personas que más "me querían", si mis padres se enteraban que pasé la noche en un bar gay se infartaban del impacto, ¡Así que me apuré! Salí del baño y acomodé las almohadas bajo las sábanas "por si acaso".

Pero cuando me crucé casi que me caigo con todo y dignidad, ¡Pensé en lo peor! En un zombie, en un fantasma o en un duende, ¡Pero era algo mucho peor! La diablita más conocida como Sophie me miraba como cuando un policía mira a un criminal, ¡Lo único que le faltaba era tener las esposas en mano!

—¿A donde crees que vas?

—Ehhhh...yo...eh....este...yo...

—Te pregunté algo estúpido, ¿A donde vas? ¿Es que acaso piensas escaparte como un loco? Si mamá se llega a enterar te aseguro que nunca más caminarás, de milagro y hablarás.

—¡Tú no puedes decir nada de nada!

—¿O qué?

—No serías capaz, demonia.

—¿Quieres probarme, estúpido?

¡Entonces la loca esa estuvo a punto de gritar y me tocó taparle la boca con la mano! La llevé a la habitación de Trevor que era la más lejana y ahí la tiré a un mini sofá, ella me miraba como si quisiera matarme y yo estaba más asustado que un pez frente a un gato, ahí fue cuando intenté calmarla y usé mi "modo de convencimiento".

—¡Te puedes ganar muchas cosas si te callas! ¡Por favor Sophie! Sé que me odias, me quieres ver asfixiado en tu habitación mientras haces un ritual satánico para que mi alma no descanse, ¡Pero en serio necesito salir a...un lugar! ¡Y si tú le dices a papá o a mamá mi muerte será segura! Ayúdame...

Ella se quedó callada, al parecer iba a decirme algo pero como que se arrepintió, así que se levantó y puso su cara de chantajista, era obvio que lo que quería iba a ser difícil de dar para mí.

—¡Quiero que me des tu laptop por una semana! Necesito descargar unas películas y entretenerme en algo, ¡Eso sí! ¡No llegues muy tarde! Si mamá o papá se levantan haré lo que sea para que no entren a la habitación, ¡Ahora largo!

—Te pones los audífonos para que no se den cuenta, ¡Gracias hermanita!

Las llaves de la puerta principal las guardaban mis padres en su habitación, así que entré a mi habitación, abrí la ventana y me lancé hasta caer en la grama suave de la vecina la amargada. Esa era mi técnica para salir de casa a escondidas, ¡Si la vieja esa no cortaba la grama yo tenía más posibilidades de salir más a menudo!

Entonces me fui corriendo al parque y en pocos minutos llegué, ahí vi a Hunter y Ash super apurados, mi cara se llenó de felicidad al notar que sólo éramos los tres, hasta que vi al idiota ese sentado en un banco... ¿Es que no se cansa de meterse en nuestro grupo? ¡Odio a Jason!