Pequeña diosa, descendiente de Poseidón que traerá poder y destrucción al Olimpo, esa era Isis, para todos; una simple mortal, para su madre; que ya veía como los dieciocho años de vida de su hija llegaba a ella, no era una simplemente mortal. Como...
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Unos minutos más tarde Evan al fin estaciona su auto al lado de una calle sumamente bulliciosa. La música que salía de la casa se podía escuchar por toda la cuadra provocando que mis oídos comenzaran a dolor y mi cabeza quisiera explotar. Observo el nombre de la fraternidad en un lindo color dorado dándole un toque elegante, que obviamente se perdía cuando veías a los chicos salir de la casa algo tomados.
Azeneth baja del auto junto a Evan y yo los imito para comenzar a seguirlos, no quería mantenerme alejada de ellos por miedo a perderme en medio de tanta gente, además, no conocía a nadie más que a ellos tres.
—Vaya —menciono sorprendida.
—Impresionante ¿No? —me pregunta Evan
—¿Acaso es más de lo te imaginabas, Marie? —pregunta Luke al pasar junto a mí.
Bastantes chicos se encuentran en el jardín quienes al ver a Luke pasar lo saludan con un choque de puños y alguno solo le ignoran y continúan disfrutando de su cerveza. Es bastante sorprendente ver que ninguno de los chicos que han saludado a Luke y a Evan no llevan tatuajes como ellos, tampoco tienen alguna perforación en su rostro. Al ingresar a la casa de fraternidad Luke se pierde de mi vista entre el mar de gente y mientras avanzamos logro aferrarme al brazo de Azeneth un tanto asustada ya que no me encontraba acostumbrada a aquel tipo de evento y menos a estar rodeada de tanta gente.
—Tranquila —menciona Azeneth riendo—. No te harán daño
—Perdón —mencioné—. No me encuentro familiarizada con este tipo de eventos —le digo honesta.
—¿Nunca habías asistido a alguna fiesta? —me cuestiona y niego—. Vaya, seré tu compañera mala influencia
Ambas avanzamos por medio del salón que se encuentra atestado de gente junto a Evan. Un chico pasa junto a nosotros y me ofrece un vaso de color rojo y un "No gracias" es lo que recibe de mi parte, pero Azeneth insiste en que lo tome por lo cual termino aceptando, el chico desaparece y no lo vuelvo a ver durante el resto de la noche.
Nosotros seguimos nuestros caminos para detenernos junto a un grupo de personas apiñadas en un sillón, por conclusión saco que son amigos de Evan y Azeneth al ver como comienzan a saludar a cada uno de ellos. Incómodamente los miro tratando de pasar desapercibida, pero mi vista se centra sobre Luke que se encuentra en uno de los brazos del sillón fumando mientras charla con otro chico de cabello ondulado, Azeneth toma mi brazo sacándome de mi trance provocando que mi mirada se pose rápidamente sobre ella.
—Ella es Isis —menciona mi nombre presentándome ante el grupo de personas—. Es nueva en la UNSW, ella es mi nueva compañera de habitación —sonríe.
Cada uno me salida con una sonrisa simpática, se podía decir que todo lucían agradables a excepción de Luke que era un estúpido egocéntrico y engreído. El rubio creía que podía tratar a las personas como a él se le diera la gana y conmigo las cosas no eran así.
