♪Do Re Mi♪ Lizardhart

capítulo diecinueve

Me mordió el labio superior haciendo que soltara un quejido.

Sus dientes son demasiado filosos para mi o también soy demasiado sensible.

Rio en bajo por lo que hice, sin deshacer el beso subió sus manos y deslizó suavemente los tirantes del vestido.

Me tense casi al instante, el vestido de cayó, estoy casi desnuda.

Demencia, esto era lo que tanto deseabas ¿No? Entonces calmate, relajate que se supone que esto es normal.

NO, NO LO ES VOY A COGER CON MI ETERNO CRUSH.

Volvió a bajar sus manos hacía mi cintura, tenía sus guantes puestos y su tacto era súper suave.

Estaba que temblaba y no sé si era de nervio o felicidad.

No quiero seguir sintiendo sus guantes, quiero sentir sus garras.

Tome sus manos con el riesgo de que gruña y se enfade conmigo pero, si no lo hago yo, él no lo hará.

Se separó de mi al notar iba a hacer

-¿Ya quieres ir al otro nivel? -preguntó de manera atrevida y mostrando sus colmillos. -

Me mordi el labio, en serio esto está pasando.

Cabecee un sí, estaba totalmente sin habla.

Sonrió con malicia, se quito los guantes y también el saco.

Me levanto y yo rodee su cintura con mis piernas y me sotuvo con sus garras fuertemente las piernas.

-¿Me amas de nuevo? -preguntó él. -

-Siempre lo he hecho. -respondí en bajo. -

-Demuestralo. -soltó el. -

Me agarró con mas fuerza y me aferre a él a como pude para besarlo.

Estaba loca por sus mordidas y la manera en que me besaba.

Espero que nadie se de cuenta, y si se dan, ni modo, estoy demasiado excitada y emocionada como para que me importe lo que pueda pasar.

Me acostó en la cama y el quedo encima mio, desenrede mis piernas y las deje al aire.

Ya quiero que esto pase ya no puedo esperar más.

Seguí besandolo y comence a desabotonar su camisa, él estaba apoyado en sus hombros y se separó del beso para dirigirse a mi cuello.

Estaré bien marcada, comenzó a darme chupetones de arriba a abajo, solté un gemido inevitablemente, la camisa de Black Hat desapareció igual que mis nervios.

Mira ese pecho marcado y delgado, mi cuello estaba adolorido y él llevo sus manos hacia mí sosten strapless y lo rompió con sus garraa dejando libre mis pechos.

Los apretó ambos y solté un pequeño chillido, me beso con fuerza si quitar sus manos de mis pechos, su lengua comenzo a entrar en mi boca y la mía en la suya, me daba pequeñas mordidas en los labios y jugaba con mis pezones.

Se alzo de la cama dejandome acostada boca arriba y con las piernas extendidas.

Chasqueo sus dedos haciendo que quedará completamente desnuda, sonrió ampliamente y se deshizo del cinturón de su pantalón.

-¿Te acuerdas cuando antes rogabas por que solo te volviera a ver? -preguntó poniendo dedos en mi boca y yo los lami mientras él los sacaba y metía una y otra vez. - ¿Te acuerdas cuando te sentabas encima mío sin mi permirso? -preguntó y sacó sus dedos de mi boca y comenzo a acariciar mi clitoris haciendo que sintiera un cosquilleo en todo el cuerpo. - ¿Te acuerdas cuando te acercabas a mi y manoseabas mi pecho? -pregunto y metió un dedo dentro de mí haciendo que me estremesca toda. - Lo recuerdas ¿Verdad? -sonrió y metió un segundo dedo y solte un gemido, se sentía aún mejor de lo que esperaba. - Pues, estoy haciendo todo lo que quise hacerte por esas cosas que hacias. -me dijo y yo trataba de contener mis gemidos, si seguía soltandolos Flug podía venir y descubrirnos. - No te vengas aún. -me ordenó sin dejar el vaivén de sus dedos. -

Como que eso va a costar.

Si sigue sé que va a ser inevitable y voy a llegar a un orgasmo.

-Black, ahh, -quise hablar pero, me costaba un poco. - Black Hat, -llame su atención y entraba y salía un poco mas suave. - Hazlo.

Ya estaba desesperada, queria ser suya ya, no importa que.

Soltó una risa maliciosa y sacó sus dedos para bajarse el pantalón, podía notar su erección y no quiero sonar morbosa pero, que paquete.

Se quito el pantalón y saco su miembro de su boxer.

Se miraba duro, ¿Yo habia hecho eso?

-Eres mía. -me susurro al oído. -

Sentí la punta en mi entrada y este era el momento de la verdad.

Entró de brusco y solte un quejido.

Era virgen y que haya entrado así, me provocó un fuerte ardor y dolor justo ahí.

-Soy virgen. -le recordé. -

-Recemos el rosario, querida. -me respondió y comenzó a moverse suave dentro de mi. -

Dolía pero, a poco comenzaba a cesar el ardor y el dolor.

-Parece que ya vamos por el quinto misterio. -comentó al sentir lo humeda que estaba. -

Sentí sus tentáculos y estos me sostuvieron las muñecas y también las piernas y con una de sus manos me tapó la boca.

Me embistió fuerte, cada vez aumentaba mas la fuerza de sus embestidas, me estaba ahogando en mis propios gemidos.

Él gruñio y salió de mi llenandome toda de semen.

Quito su mano de encima mio y respire hondo, aun seguia sensible y con escalofrios por lo que habia pasado.

Comencé a sentirme adolorida y lo mire, se acomodo la ropa interior y el pantalón.

Tenia una inmensa sonrisa en su rostro y yo también.

Si moría mañana, moría feliz, demasiado feliz.

-¿Mía? -preguntó. -

¿Despues de lo pasado aún lo duda?

-Siempre. -respondí y cerré mis piernas y me cruce de brazos tapando mis pechos. -

Lo único seguro despues de esto es que iba a dormir muy bien.