♪Do Re Mi♪ Lizardhart

capitulo veinticinco

¡POR FIN VINO!

Ya era hora.

Voltee a ver y Brittany no dejaba de apuntarme con el rayo, me quedo a centímetros de mi pava roja.

Flug estaba detrás apuntándola a ella, era un rayo distinto al que tenía la zorra esta.

Nunca me había sentido tan feliz de ver esa bolsa en mi vida.

Destrúyela de una vez, ya mátala.

-Baja ese rayo y vete de aquí. -le ordeno, en ese momento dejo de apuntarme y se dio la vuelta para encarar a Flug. -

-Dilo por ti, -respondió y mientras lo hacía comencé a buscar como zafarme la pata del piso. - tú no tienes autoridad sobre mí. -termino de hablar y rio de manera rara. -

Vamos, sigan discutiendo, creo que ya podre zafarme.

Espera, se me ocurre algo mejor, voy a gritar, si Blackie ve esto será todo un escándalo y así se joden los tres de una sola vez, tres pájaros muertos de un solo tiro.

-¡BLACK HAAATTTT! -grite lo más fuerte que podía, esta vez no me puede callar tan fácilmente, sino se jode. -

-¡TE CALLAS O TE MATO! -grito roja de furia, su cara parece un tomate arrugado. -

Me apunto de nuevo pero, me dio igual.

De pronto parpadee y la tipa no estaba, Flug estaba bajando su rayo y sonreí orgullosa, al fin está muerta esa prostituta sidosa.

En serio no la soportaba ni a ella ni a su hermana Kiaryu, eran lo peor de este mundo, eran igual de molestas que una piedra dentro de tu zapato.

Iba a felicitar al baboso y probablemente ojeroso de Flug cuando escuché unos "ih ih ih", no me pidan que sea clara por qué no yo tengo la más mínima idea de lo que estoy escuchando, es algo raro.

-¿Que chingados es eso? - pregunte con curiosidad y viendo por todos lados. -

Pregunta seria, ¿Las hormigas hablan o cualquier otro bicho pequeño lo puede hacer?

Por alguna rara razón siento que así sería si hablarán.

-Es Brittany. - respondio y logro sacarme la duda. - La agrandarse más luego. - dijo, no hombre, mátala ya. -

La tomo en sus manos y apenas podías verla y solo podías entender "ih ih ih".

Estás perdida, mejor deja de chillar.

Y yo sigo con la pata atorada.

Y ¿El oso? ¿Dónde esta el azul ese?

-Tu vas aquí, - dijo y se metió a la golfa en un bolsillo de la bata, después de todo no lo anda solo por decir que es científico. - es mejor que te calles. - le ordenó un poco molesto. -
-¿5.0.5? - pregunté, se me hacía la cosa más rara del mundo que no estuviera detrás de él. -

-Esta en la entrada, - respondió y pues, si cree que así nos ayuda pos que bien. - sentía que podía haber mucha violencia... - habló el papá luchon. - Hay que sacarte de esta y vamos con Black Hat para terminar con este juego de una vez por todas.

Eso me golpeó más duro que mi bate a cualquier cabeza de un tipo que tenía que matar.

Era bonito lo que habíamos logrado los tres pero, teníamos que volver a la realidad, una vez que trabajas con Black Hat no puedes dejar de hacerlo y en mi caso.

En mi caso, yo no puedo dejar de pensar en él, en amarlo, no puedo odiarlo ni aunque quiera.

Es horrible esto, me enojo y todo pero, todo fue casi de mentiras, yo muy dentro de mi no puedo dejarlo atrás.