~Chocolate Candy~ (Hyunmin) (CandyLike #2)

~EXTRA 4~

Todos estos capítulos extras consisten en distintas "escenas", narradas de forma cronológica, que toman parte a penas finaliza la historia principal, y recorren alrededor de 5 años.

Advertencia: Smut.

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-Nada de dulces después de las seis, a menos que sea un pequeño postre, una fruta todas las mañanas, y...

-¿Puedes calmarte? Estás dejando a Taehyun con los mejores tíos del mundo -afirmó Jeongin, asintiendo ante sus propias palabras.

-Difícil de creer -murmuró, solo para molestarlo.

Hyunjin enredó los dedos con los suyos, y le sonrió con suavidad.

-Es hora de irnos, amor.

Se acercó a Jeongin y para besar a Taehyun, en forma de despedida.

-Papá y Appa volverán pronto, lo prometo.

-Nosotros nos la pasaremos genial -afirmó Jeongin-. Intenten pasarla el doble de genial -soltó esta vez con tono bromista.

...

-¿Tienes frío?

-Un poco -admitió-. Supongo que es por las montañas y todo eso.

Hyunjin lo sujetó por la cintura, atrayéndolo a su cuerpo mientras caminaban.

El lugar era una pequeña isla, rodeada de pequeños arroyos, mucha vegetación, y preciosas cabañas de madera. Desde el momento en que llegabas, podías percibir el aroma a naturaleza y frescura. Y aunque no pudieran ver todo, debido a la oscuridad de la noche, las luces permitían observar la belleza que inundaba la costa.

-Es hermoso -susurró Seungmin.

-Me siento más relajado, simplemente caminando por la vegetación.

Asintió, comprendiendo lo que su esposo sentía. Porque podías percibir la paz del lugar, y su cuerpo se sentía inmediatamente más relajado, mucho menos en guardia. Incluso sus pensamientos se comenzaban a descontracturar, dejando sus preocupaciones cotidianas, lejos de su alcance.

...

La maleta fue dejada a un lado –porque no se gastarían en acomodar ropa por un fin de semana— y comenzaron a inspeccionar el lugar con la mirada. Era una pequeña cabaña, claramente diseñada para una pareja. Cálida y acogedora.

-¿Deberíamos dormir ahora, para mañana tener más energía?

Hubo una pausa silenciosa, que fue prontamente rota por las carcajadas de Seungmin, ante sus propias palabras. Hyunjin no tardó en unirse a las risas, antes de lanzar su móvil hacia el pequeño sofá y empujar al menor contra la cama.

-Tendremos todo el fin de semana para descansar... Hay que aprovechar las noches ¿No lo crees?

La respuesta de Seungmin no fue verbal, sino que empujó sus labios con fuerza contra los del mayor, besándolo con una intensidad correspondida.

-Dios, siento como si hubieran pasado siglos -jadeó sobre los labios contrarios-. Te necesito tanto Hyunjin. Mucho.

Este, acomodándose entre las piernas del menor, comenzó a repartirle suaves besos sobre el cuello. Lentos y calientes, casi como simples roces que le daban escalofríos.

Seungmin llevó las manos hacia la camiseta del mayor, comenzando a subirla, para finalmente ser completamente hecha a un lado por este; quién hizo lo mismo con la camiseta de Seungmin, antes de volver a unir sus labios.