Capítulo 6 *Mericcup*

744 76 59
                                    

Sus piernas daban toda la fuerza que le proporcionaban. Cada paso veloz hacia liberar jadeos de cansancio y desesperación por salir de aquellos fríos e inseguros muros del castillo.

-¡Rápido! -Escuchó a un oficial más cerca de él por los pasillos juntos a sus pasos.

Llegó al final de un pasillo frente a una puerta que le prohibía el paso.

Intentó girar la perilla, pero era imposible, tenía seguro. Pateó lo más fuerte que podía, pero también sólo lograría lastimar su rodilla.

Miró la ventana triangulas a un costado suyo, se fijó en el exteriorpara mirar el tejado del techo de pisos más abajo.

No estaba seguro de aquella alocada idea, pero no se permitiría atrapar, tenía que volver por ella.

Se impulsó dando pasos atrás.

-¡Ahí está! - Un guardia le apuntó con su espada - ¡Eugene!

No hizo caso, corrió para dar un brinco y quebrar el cristal que estaba cubierto de una delgada capa de hielo también debido a la decoración externa.

La escarcha de los tejados provocaba que resbalara con velocidad. Pasando varios golpes a sus costados con estructuras de la arquitectura del castillo y las gruesas y deformadas capas de hielo.

Llegó a la orilla del castillo y por reflejo a protegerse, se agarró de lo que pudo para no caer.

Su respiración era agitada y su corazón creería que podría expulsarse en cualquier momento.

Miró de la ventana de donde salió, pero no lo logró debido a que avanzó demasiado.

-Vamos, vamos -Se murmuró para tomar fuerzas e impulsarse con lentitud hacia arriba para conservar el equilibrio estando de pie.

Avanzaba con cautela de un tejado a otro, iba en dirección a los establos de los guardias de Arendelle en busca del caballo que trajeron consigo.

-¡Allá va!

De nuevo la presión se adueñó de él cuando miró a guardias en el tejado y otros en el patio principal.

-¡Carajo! -Gruñó avanzando más rápido.

Siguió avanzando a medio paso cuando uno de sus pasos resbaló por un costado, haciendo que cayera de nuevo, pero sólo de lado.

Sus costillas recibieron el golpe de la gruesa capa de hielo. Se puso en pie y avanzó para rápido a los establos. Y sin pensarlo una vez más, saltó al tejado de estos para caer después de un montón de paja.

-¡Max! ¡Max!

Los caballos presentes comenzaron a relinchar a causa del susto que provocó el castaño.

Una vez más de pie, comenzó a cojear por el dolor que recibió su pierna de la caída.

-¡Max!

-¡Atrápenlo! -Un guardia ordenó corriendo en su dirección.

Eugene se dio vuelta para correr, pero el corcel blanco con el escudo del Sol de su reino, apareció para que subiera a él.

Eugene y Max salieron corriendo del lado contrario para rodear lo que pudiera de la gente trabajadora y huir entre las grandes puertas de las torres del castillo.

-¡No debe escapar!

Ahora una tropa en caballos trotaba en dirección a este que se dirigía a los bosques para resguardarse y huir lo más que pudiera de los guardias.

The Snow Queen. 2do libro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora