¿Quién arruino mi vida?

Llanto y consuelo

Jin ZiXuan por fin se rompe.

Su corazón ya no soportaba la culpa.

Su alma se quiebra mientras habla.

—He mentido y lastimado a todos los que me aman. Te hice sufrir. Traje dolor a mi familia y a la tuya. No puedo perdonarme. Esa noche... esa maldita noche, la maldita noche... — a ZiXuan le cuesta trabajo hablar por culpa del llanto —. ¡No pude protegerte! ¡Maldición, no te protegí! Pero el celo... el maldito celo que siempre llega en los peores momentos me cegó. El celo me obligó a cometer una gran atrocidad... Todo lo malo que ha ocurrido no fue tu culpa, tú eres inocente. Yo cambie tu vida y la de Wei Ying.

Jiang YanLi observa al Omega llorar un poco más. Ella acerca su mano para acariciar su mejilla, pero se detiene. Duda si tocarlo o no. Termina por alejarse un poco.

— ¿Por qué no me dijiste la verdad?

Le hubiera creído.

—Quería hablar, pero mamá no me dejaba y mi hermano tampoco quería que se supiera la verdad.

Jiang YanLi se sorprende.

— ¿Tu hermano? Él... él...

— Mi madre tuvo la idea de que Wei Ying cargara con toda la culpa... ella se encargó que las pistas lo culparan a él y a nosotros no. No sirve de nada culparla. Ella sólo quería protegernos... a mí y a mi hermano...— el pecho de ZiXuan arde de dolor —. Wen Chao, Nie HuaiSang, Mo XuanYu, Xue Yang, mi hermano y yo... te arruinamos la vida — confiesa ZiXuan. Siente que se muere.

La Alfa no puede hacer otra cosa más que cubrir su boca con su mano y agrandar los ojos con miedo.

¡Ha estado cerca de sus violadores en la boda de Qin Su! ¡Ahora entiende porque Nie HuaiSang no la miraba a la cara!

Y eso no es lo único que la tiene asustada.

No hace mucho, Jiang Cheng le comentó que Wei Ying puede ser hijo de CangSe SanRen ya que tuvo un romance con el mejor amigo de su papá. Sin embargo, no están seguros y esperan las muestras de ADN. Ese sobre que será recogido mañana temprano.

Ojala... sea negativo... ojala CangSe SanRen no sea madre de Wei Ying...

—ZiXuan...

—Ódiame si quieres, tienes todo el derecho de hacerlo. Aunque me duela — ZiXuan vuelve a llorar. Intenta controlar su respiración acelerada —. Mi corazón está atado al infierno. No puedo olvidar esa noche. No puedo librarme de este dolor. Me quede callado por cobarde. Me quede callado porque no quería que me odiaras. Deseo que estés bien. Quiero que seas feliz. ¡Yo quería que fueras feliz a mi lado!

Jiang YanLi siente mucho dolor, sus ojos se vuelven cristalinos.

— Tú... yo...

Por un lado, no quiere creer esto e ignorar lo que le han dicho. Pero sabe que eso no está bien, no puede evadir la realidad, por muy cruda que sea.

No sabe cómo actuar. No sabe que es lo correcto. ¿Debería darle una bofetada o abrazarlo? ¿Debe regresar a casa? ¿Debe quedarse y besarlo hasta quedarse sin aire? ¿Qué es lo correcto? Está horrorizada pero al mismo tiempo siente lastima.

— Mira lo que hice contigo. Si hubiera alzado la voz, si no me hubiera dejado manipular, las cosas hubieran sido diferentes. Dentro de mí, existen miles de demonios que me torturan día y noche, día y noche. ¡Decir lo siento no basta! Un lo siento no borra mis errores, no cambia los hechos. Aunque me perdones, siempre recordare el daño que te cause. Voy a recordarlo hasta el día en que me muera — ZiXuan se seca las lágrimas. Se prepara para lo peor — .Hay algo que no te he dicho... y cuando lo diga... definitivamente no querrás perdonarme. Sé que te perderé para siempre.