¿Quién arruino mi vida?

Pastel con lágrimas y sorpresas

Jiang Cheng y Jin ZiXuan se están viendo con seriedad, en la sala de la casa Jin. Ninguno ha dicho nada en un buen rato cuando el Alfa pidió la custodia total de Jin Ling.

Jiang Cheng está cruzado de brazos esperando una respuesta por parte del Omega. ZiXuan se revisa las manos vendadas, se había cortado cuando rompió el espejo.

Hace una semana, Jiang Cheng se fue a vivir a la mansión de enfrente. Sus padres y hermana se asombraron al verlo llegar con una maleta y con los ojos hinchados por haber llorado tanto. Sólo les contó que las cosas con su esposo se complicaron.

Nie HuaiSang fue hablar con Jin ZiXuan y pedirle perdón por abrir a boca y no le ocultó que se había acostado con Jiang Cheng. ZiXuan no se enojó, pues estaba completamente seguro que tarde o temprano se sabría la verdad. Tampoco le molestó que se acostara con Jiang Cheng, pues, no le duele nada. Sólo se siente mal por haber provocado que el Alfa perdiera el control.

Ahora mismo Jiang Cheng quiere tomar una decisión con ZiXuan, la definitiva.

— Quieres quitarme la custodia de A-Ling... — habla ZiXuan —. No es tu hijo.

—Está registrado como mi hijo, por lo tanto, lo es. Y sí, voy a quitarte la custodia. Agradece que la casa de mis padres esté frente a la tuya. Jin Ling de todas maneras siempre está en la escuela, encerrado o con los Lan. No notaras su ausencia.

—Jiang Cheng, no me lo quites. Por favor.

—No quiero que mi hijo viva a lado de un mentiroso como tú — Jiang Cheng golpea la mesa con fuerzas.

—Y yo no quiero que mi hijo viva con un alcohólico. ¿Crees que no me di cuenta que volviste a beber?

—Yo... eso lo puedo solucionar. Lo tuyo no tiene solución.

—Los dos fallamos. No me eches toda la culpa a mí.

Jiang Cheng se levanta y camina a la salida.

—Iré por A-Ling. Ya lleva una semana con los Lan.

—Déjalo. Sigue enojado con ambos.

—Por tu culpa. Tú causaste todo esto. Por tu culpa enloquecí y A-Ling me vio a punto de hacer una atrocidad. Eres el causante de esto.

— ¡Lárgate!

Jiang Cheng cruza la puerta, pero se detiene. Evita que ZiXuan cierre la puerta.

—ZiXuan... Yo...

—No me repitas lo de anoche.

—¿Anoche?

—¡Me llamaste estando ebrio! Pediste que volviéramos a tratar. Ya lo intentamos, Jiang Cheng y es imposible. No insistas...

—Nunca me amaste ¿verdad?

ZiXuan baja la mirada y trata de controlar su respiración. Le duele el pecho y se le escapa una pequeña lágrima.

—Te quiero, pero no te amo. Lo siento.

—¿A quién amas? Necesito saberlo.

—No tiene importancia. Lo siento.

—¿Es la madre de Jin Ling?

—¡Lamento tanto haberte herido! Jiang Cheng, lo siento tanto — ZiXuan lo ve a los ojos con los ojos cristalinos y el cuerpo temblando lleno de tristeza y arrepentimiento —. Trate de amarte, trate pero no pude. Lo siento, lo siento. Jiang Cheng, lamento haber arruinado tu vida.

Jiang Cheng tiene el deseo de abrazarlo. Siente que al hacerlo, no podrá darle el divorcio. Se resiste incluso de besarlo y decirle lo mucho que lo ama.