Gracias y... lo siento.

5K 577 314
                                    


YanLi está sentada en su cama mirando un lacrimógeno. El otro día se encontró con Wei Ying, el Omega le volvió a insistir que deberían trabajar juntos pero ella intentó de huir de él otra vez, pero para su mala o buena suerte él la alcanzó. En vez de seguir con el tema, le dio ese frasco para que tenga cuidado en las calles, incluso se ofreció en darle clases de defensa personal. También le dijo que se pueden encontrar en el mismo restaurante donde se vieron la vez pasada, a la misma hora que acudieron en el local y en el mismo día (un jueves) en caso de que ella acepte aprender algunas técnicas para defenderse o... si está dispuesta a encontrar a los desgraciados.

Se acuesta en la cama. Recuerda esas palabras tan duras que le dijo.

Hay una pareja que está teniendo relaciones sexuales, pero no hacen el amor

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Hay una pareja que está teniendo relaciones sexuales, pero no hacen el amor.

Ella se queja, claro, no lo disfruta, y tampoco piensa en reclamar su disgusto por miedo. La peor parte es el nudo. No importa cuántas veces lo hagan, nunca deja de dolerle. ¿Cómo es que algunas personas disfrutan de estos momentos? Duele, es cansado y es demasiado incomodo.

Después de que el nudo se afloja, el Alfa se aparta de ella muy molesto, y la llama aburrida. Se aleja.

La Omega toma su celular. Su marido se lo arrebata y observa sus mensajes.

— ¿Y porque te interesa saber la salud de tu alumno? ¿Eh? No te metas en cosas ajenas, mujer.

Wen Chao le regresa el teléfono a su esposa.

—Es nuestro sobrino — contesta ella mientras llama a Wen Qing.

—Espero que me des un niño ahora sí. Estoy harto que sólo te preocupes por los hijos de otros.

—No es mi culpa si no quedo embarazada.

—Eres una Omega, tú deber es darme hijos.

—Cuando estoy en celo ni si quiera me miras. Hay más posibilidad de que tenga un bebe si tan sólo me tomaras en ese periodo.

— ¿De qué sirve si no te vas a acordar de nada después? Y no me gusta como actúas cuando tienes tu celo. Eres demasiado empalagosa.

—Tampoco es mi culpa.

—Sí lo es. Dos años de casados y nada de nada. Si continúas así mejor me buscare a otra. ¿Te parece?

Ella no contesta, se concentra en marcar al número de la casa de la familia Lan. Wen Qing toma la llamada. Wen Chao se retira.

—Qing, ¿ya está mejor Yuan?

Sí, esta mejor. Necesito hablarte de algo serio. ¿Te acuerdas del delincuente que mi hijo atropelló?

—Sí, XiChen me conto que se fue. ¿Por qué? ¿Te hizo algo?

Al contrario, él dono su sangre para salvar a SiZhui. Salvo a mi hijo pero... creo que Lan Zhan está enamorado de él.

¿Quién arruino mi vida?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora