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Omnisciente.

Tu mirada se funde con su mirada, al recordar todos los problemas por los cuales pasas intentas levantarte, el brazo de tu novio impedía que puedas levantarte, intentas despertarle más un sonido en la puerta te hace girar.

-¿que estaban haciendo?- estaba enfadado cosa que llamo tu atención.

-durmiendo, ¿no ves?- ríes para ti misma observando como rodaba los ojos.

-preparate, hoy es el día- susurra con los ojos hinchados, asientes moviendo a tu novio para despertarlo.

Tn.

Me levanto al ver que por fin me sueltan, le beso la mejilla para caminar al baño, dejando que el frío de la lluvia artificial se cole hasta mis huesos, al salir observo mi rostro el cual estaba más pálido de lo usual, ato mi cabello en una coleta alta bien desordenada, me visto con un vestido bastante sencillo color negro junto a mis convers negras. Camino fuera del baño observando a mi novio con una taza de café en sus mano, tenía su torso descubierto, sus pantalones negros estaban desabrochados dejando apreciar sus boxers.

- gracias - susurro al tomar la taza entre mis dedos sintiendo el calor del vapor.

Mis lágrimas eran retenidas con dificultad, mis latidos cada ves más fuertes, observo con la mirada cristalizada al azabache frente mio dejando escapar un fino sollozo, siento sus brazos rodear mis hombros transmitiendome aquella paz que tanto anhelaba tener, seco mis lágrimas para tomar su mano entrelazando nuestros dedos. Con cuidado deposito un tierno beso en mi frente.

- descuida, yo estoy contigo - susurro antes de colocarse una camisa negra mientras yo acababa mi café.

Al bajar observe el gran número de personas que rodeaban el cuerpo inerte de mi madre, al verme se formo un rotundo silencio que fue opacado por las suaves notas musicales proveniente de la orquesta funebre, con la mirada en alto camino hasta llegar a la pequeña caja donde deposito una pequeña rosa antes de cerra lo que sería su nueva cama.

La primera lágrima se deslizó por mi mejilla, en silencio caminamos sintiendo como cada paso que avanzaba era un maldito martirio lleno de dolo y tristeza. Al llegar junto a la pequeña limusina blanca tomo nuevamente la mano de mi novio en busca de fuerza, pero otra mano también me sujeta logrando sentir lo que hace tiempo no sentía, un calor fraternal.

Observo con lágrimas al acompañante de mis abuelos el cual como entendiendo mi agradecimiento asintió dejando escapar varias lágrimas, al llegar donde dejaríamos el cuerpo se dio inicio a la ceremonia con las palabras de sus más grandes amigos, luego vinieron mis abuelos quienes entre lágrimas acabaron contagiando su tristeza. Al llegar mi turno de dedicarle algunas palabras a mi difunta madre me acerco a su tumba con un ardor en mis ojos.

- madre, me enseñaste todo lo necesario para sobrevivir a tu lado, para afrontar la vida junto a ti, pero jamás aprendí a vivir sin ti, a despertar sabiendo que ya no te volveré a ver por más que lo desee, como me gustaría despertar de esta horrible pesadilla para abrazarte, ya no sentir este horrible sentimiento que me daña, poder decirte de nuevo...te amo mamá, pero ahora solo puedo decir...con el dolor de mi alma...¡Feliz cumpleaños!, ¡descanza!, ¡VUELA ALTO! - debastada abrazo mi cuerpo sintiendo el abandono, me arrodilló dejando que las lágrimas ahoguen mis sollozos.

- ven princesa - susurra Fred tomando con dulzura mi mano, pero no quería alejarme de ella.

Con un poco de esfuerzo me alejo de su lado para abrazar a mis amigos, suelto varios gritos llenos de dolor, de frustración, no puedo soportar este sentimiento.

 Juguemos a ser novios || Fred & Tu || FnafhsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora