CAPITULO CINCO: SOCIÓPATA

16.1K 628 71
                                    

Sábado 01 de Julio

Cuando dije que mi mundo se vino abajo, fui textual, mientras estaba en la sala de espera del puesto policial, y escribía lo sucedido, solo para tener algo en que entretenerme mientras esperaba, vi salir esposado a Thomas, no me dio cara, no me vio, quizás por vergüenza, pero ¿de qué? Si yo sé que es inocente, pero al parecer no lo soporté, sentí algo en mi brazo, como si me picara, quizás por los nervios que sentía, intenté rascarme pero todo se nublaba ante mis ojos, logré escuchar que alguien me hablaba, y mientras me desvanecía me tomaron en brazos.

Desperté  en una habitación que no conocía, me sentía cansada a pesar de que era evidente que había dormido, tenía una sonda anclada en mi mano, miré a la derecha  y vi un enorme ventanal, era la habitación de un hospital, todo era blanco, no habían adornos, olía a desinfectante, luego giré a la izquierda y vi sobre el mueble a Daniel,  estaba dormido, yo no entendía su presencia en el lugar y menos entendía que hacía yo en aquel lugar.

Cuando me vio se desperezó al mismo tiempo que esbozaba esa tierna y juguetona sonrisa propia de él.

-¿Que hago aquí? ¿Thomas donde está? ¿Está bien?- le pregunté algo desesperada intentando levantarme, lo que provocó que él se levantara de inmediato y se acercara a mí.

-Todo está bien, no te preocupes, él  está bien.- me dijo en tono tranquilizador.

-¿Dónde está?- insistí.-¿El sigue retenido?- pregunté asustada.- ¿dormirá allí? No puede dormir allí- dije desesperada.

-Bueno…si…hasta que todo se aclare- dijo Daniel pero yo no le creí, había algo que no encajaba.

De pronto ingresó la enfermera e hizo que Daniel se retirara.

-Buenos días bella durmiente – no entendí el comentario, por dormir un par de horas no podía ser una bella durmiente, y era una exageración que me hayan puesto este candado en mi mano.

-¿Por qué me dice eso?- le dije ofuscada.

-Decirte qué?- me preguntó ella mientras  inyectaba algo en el suero.

-Bella durmiente.

-Has dormido 3 días y tuviste un apuesto príncipe cuidando tu sueño.

-¿Qué?- le dije alarmada.

-Tranquila, tuviste una impresión fuerte, debes estar tranquila.- me dijo intentando calmarme.

-Puede llamar a Daniel por favor.- le dije hiperventilando.

-Solo si te calmas.- me dijo como si fuera mi madre.

-Me voy a calmar cuando él venga.- le dije intentando parecer calmada.

Y se fue de la habitación asegurándome que le avisaría y dijo suspirando: “enamorados”.

Al poco rato Daniel ingresó, algo preocupado.

-¿Estás bien?- me dijo intentando sacar una sonrisa de su rostro.

-No, no estoy bien- le dije algo alterada- ¿Como puede ser que hayan pasado tres días? ¿Que ha pasado con Thomas? ¡Debo verlo, debo salir de aquí!- le ordené.

-Será mejor que te lo diga ahora, quizás después sufras una recaída.

-¿Decirme que?- insistí intrigada.

-Thomas y Jane confesaron- me dijo muy serio.

-¿Confesaron? ¿De qué hablas? Dilo de una vez- estaba confundida.

ASI PASA CUANDO SUCEDEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora