Capítulo 44: Hechizo Johnson.

42 7 0
                                    

Las emociones son impulsos que comportan reacciones automáticas y constituyen un conjunto innato de sistemas de adaptación al medio por parte del individuo.

Por lo general las emociones tienen una duración menor que los sentimientos, y son las que impulsan y motivan a las personas a actuar. Son más cortas pero también más intensas. Como por ejemplo; sentirme sorprendida y un poco molesta al ver como una de las encargadas del campamento le sonríe y coquetea despistadamente a Josh.

–¿Tienes ese sexto sentido o es mi imaginación?– Madison se acerca a mi con una sonrisa de burla– Por que desde que llegamos al campamento, no haz dejado de ver a la chica que esta con mi hermano. Empiezo a creer que piensas que tiene otra intención con él, ya sabes, Josh hombre y ella mujer, ambos son sexo opuesto.

–Y yo empiezo a creer que últimamente intentas molestarme más de lo normal– Ruedo los ojos y observo hacia otro lado escuchando gritos por parte del servicio– Y no me importa con quien esté tu hermano, es su vida, no la mía.

–Claro, pero una cosa si te digo– Me abraza haciéndome cosquillas en los costados– Josh por suerte, te quiere solo a ti.

–¿Por que no eres como una mejor amiga normal que se molesta por estar interesada en tu hermano?– Resoplo empezándome a sentir nerviosa por su respuesta. ¿En verdad siento algo fuerte por Josh?

Ella suelta una enorme carcajada haciendo recaer varias miradas hacia nosotras y atrayendo a los chicos con los que ahora pasa más tiempo que conmigo.

–Eres mi mejor amiga. Que mejor chica que tú– Sonríe sonando sincera– Además, se por lo que ambos han pasado. Quizá al principio si me resultó un poco extraño, pero ver a mi hermano con la chica que considero casi mi hermana, sería asombroso, imagínate si llegan a tener hijos, ¡literalmente serían mis sobrinos!

Ese cosquilleo vuelve a aparecer al escuchar el nombre de Josh. Creo que empieza ser un gran malestar en mi estomago, de seguro desayune algo que me cayó mal en la mañana.

–Estas delirando– Empiezo a caminar sintiendo sus pasos detrás de mi– No hay y no habrá nada con tu hermano.

–¿Y si te digo que la chica con la que está, acaba de robarle un beso a Josh?

–¿Qué le robó un qué?– Grito volteando a verla. Varias personas empiezan a cuchichear entre ellas mirándome divertidas.

Ella suelta un gran ¡aja! atrayendo la atención de la mayoría de personas en el lugar, incluyendo la de Josh y la chica fea a su lado. ¡Primero la tal Eva y ahora está chica!

–¿Puedes dejar de hacer eso?– Susurro tratando de alejarme de ella pero entre más lo hago, más cerca se pone de mi– Solo, ya sabes. Tu hermano es como un hermano más para mi y...

–Eso no parecía el martes de la semana pasada en la noche, eh– Me detengo frunciendo el ceño– ¿Qué pasa?

Miro de nuevo a Josh y este frunce el ceño al ver mi rostro de confusión. Vuelvo mi vista a Madison y entiendo que ella puede ayudarme a descubrir una cosa, algo que he querido saber desde aquel día que por motivos desconocidos, se a alargado sin saber el por qué.

–Tú lo sabes– Murmuro mas para mi misma– Tú estuviste ahí, ¿por que no lo pensé antes?

–Eh, no entiendo lo que estas hablando– Tomo de su mano y con paso rápido nos alejo de un pequeño grupo de personas– ¿A donde nos llevas? Te recuerdo que estamos en un bosque, no hay señal y no conocemos para nada el lugar, así que..

–Madison– Paro al ver que estamos lo suficientemente alejadas de las demás personas pero no lo demasiado como para perdernos– Necesito que me expliques tan solo una cosa. Ahora dime, ¿qué fue lo qué pasó el martes en la noche con exactitud?

¡La Gran Mentira!© Donde viven las historias. Descúbrelo ahora