¡La Gran Mentira!©

Capítulo 46: Gran tragedia (Parte 2)

–¡No!– Grita un poco desesperado. Varias miradas recaen sobre nosotros en modo de espectadores.

–¿Qué es lo qué pasa?– Josh llega a nuestro lado y su fulminante mirada se dirige a la mano con la que Aiden sostiene mi brazo– Suéltala.

A pesar de que Aiden no ejerce ningún tipo de fuerza en mi, suaviza un poco más su agarre pero sin soltarme, al parecer el tono autoritario del castaño frente a nosotros lo hace molestar pues se coloca aún lado de mi firme.

–No estoy hablando contigo– A regañadientes contesta– Y para tu información, no la tengo a la fuerza.

Josh en cuestión de segundos dirige su mirada a mi y vuelve a donde se encuentra la mano de Aiden.

–Te dije que la soltarás– Exclama tratando de sonar calmado– Créeme que así como la noche del martes pasado, puedo volver a romperte la cara en un segundo.

Golpear. Martes pasado. Aiden y Josh. Otro pequeño flashback aparece en mi mente mandándome a aquella noche que tan difícil me es recordar. Era Josh entrando a mi casa molesto, parpadeo y en un segundo aparece pegándole con fuerza. ¿Habrá sido real o parte de mi imaginación?

–No te tengo miedo.

Es lo último que dice Aiden antes de ver como Josh se acerca a nosotros y me toma de la cintura alejándome del chico. Me mareo por un segundo y siento como todo me da vueltas, pero en el instante en el que me recupero, veo el puño de Aiden estampar en la mejilla del castaño.

–¡Aiden!– Asustadas exclamamos al unísono Madison y yo.

Josh se tambalea mientras una chispa de ira se asoma en sus ojos fulminando con la mirada a Aiden. ¿Tan difícil es controlar las emociones de los hombres?

–Antes de que hagas una estupidez– Y las palabras de Madison quedan en el aire cuando Josh se va encima de Aiden y le regresa el golpe pero en la mandíbula. ¡Auch!– ¡Josh, no!

Un enorme y agudo grito sale de mi garganta espantada. Ellos lo escuchan pero siguen en lo suyo, Josh encima de Aiden y después de unos segundos Aiden encima de Josh. ¿Por que nadie hace nada?

Intento acercarme a ellos pero un agarre fuerte me lo impide.

–No lo hagas– Un chico un poco más alto que yo, pelinegro y de tez blanca, me toma con suavidad de la cintura– Te pueden lastimar.

Con suma rapidez me muevo y llego hasta los chicos cuando sin saber quién, como y en que momento, me empuja y azoto de manera fuerte en la tierra rasposa. Me vuelvo a marear y empiezo a verlos borroso. Lo único que se, es que mi cabeza pego en el suelo, me duelen las manos y me quedo con la preocupación de los chicos.

–¡Brooke!– Veo cuatro figuras dobles acercarse a mi. A lo lejos escucho como una chica grita que el otro equipo está acercándose pero mi campo auditivo empieza a perder fuerza– Tas...en..keeee.

[...]

–¿Es la segunda vez qué pasa?

–Es la segunda. La primera vez le dijeron que necesitaba comer mejor, pero la verdad, es que la he descuidado bastante como para no darme cuenta de ello– Al instante, la voz distorsionada maldice.

–¿Es usted su hermano?

–Lo soy, ¿ella esta bien verdad?– Liam pregunta mientras mi oído trata de captar mejor el sonido de su voz.

Un silencio se incrusta por unas milésimas de segundo. ¿Por que me palpita la cabeza?

–Está bien, solo fue un pequeño golpe, pero por el momento, le recomendaría reposo– Escucho varios suspiros cuando intento abrir los ojos pero siento como estos me pesan– Mínimo toda la tarde restante.