Capítulo 45: Gran tragedia (Parte 1)

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–¿Por que siempre qué hay problemas, ustedes están de por medio?– El director del instituto nos mira estresado– Háganmelo saber por que no logro entenderlo.

Después del problema que tuvimos. Aiden, Josh, Madison, Gabriel, Bradley, Ethan, Jayco, Sheyla, Liam y yo, nos encontrábamos en la cabaña en la que se hospeda el director. Sí, aunque sea algo difícil de creer, estábamos todos en el mismo sitio y todo gracias a Aiden. O bueno, creo que yo tuve un poco de culpa también, aunque no pienso admitirlo en voz alta, por lo menos no todavía.

–Señor Director, nosotras no tuvimos la culpa– Exclama Madison empezando a molestarse de nuevo.

–¿Ah no?– Pregunta sarcástico él– ¿Entonces por que estabas encima de Ethan tratando de embarrarle más lodo en la cabeza dentro del charco? O es más, ¿que hacia la señorita Johnson tratando de no dejar salir al joven Williams del saco de papás en la carrera?

En mi defensa, debo confesar que Jayco Williams me hizo molestar, es un cretino, un idiota, uno más como Aiden. Así que si, después de todo, no me arrepiento de haberlo metido en el saco de papás, o bueno, por lo menos todavía no me arrepiento.

–¡Y yo que!– Exclama Sheyla– Yo no hice nada de eso.

El director se soba las sienes impaciente.

–Usted fue la más grave, sabe muy bien que no está permitido agredir a ningún compañero del instituto señorita Sanders– Resopla molesto y empieza a dar vueltas en su lugar– Lo único que quiero en este momento, es que alguien me diga, ¿cómo fue que empezó todo esto?

Levanto la mano sintiéndome con un poco de valor en este instante.

–Yo lo haré– Contesto carraspeando llamando la atención de todos.

–Adelante señorita Johnson.

–Bueno, todo comenzó ayer después de que llegamos cuando...

(24 HORAS ANTES DE LA GRAN TRAGEDIA...)

–¡Voala! Y así es como se elabora un pájaro de papel– Miro aburrida como la persona encargada nos enseña a hacer figuras con una simple hoja de papel– Ahora lo siguiente es hacer una flor.

Después de 15 minutos que han parecido una eternidad, las puertas del comedor se abren haciendo presente la figura de una mujer como de unos cuarenta y tantos años.

–Joshua, ¿por qué haces sufrir a estos jóvenes?– La mujer entra y es inevitable no detallar su vestimenta.

Un largo, rojo y llameante vestido hace moldear su cuerpo de manera perfecta, sus zapatillas de color oro combinan con sus aretes de aro haciendo de su rostro uno más delgado.

–Jefa.... digo, señora Rich, no pensé que fuera a llegar tan temprano– El tal Joshua se levanta y saluda dándole un beso en la palma de la mano a la mujer.

¿Será ella la dueña del campamento?

–Ya te he dicho que no es necesario que hagas eso, hijo– La mujer lo aparta con suavidad y se coloca en medio del comedor subiendo a un pequeño escenario con un micrófono en el centro– Muy buenas tardes jovencitos, se que la mayoría no me conoce por el momento así que permítanme presentarme. Mi nombre es Xana Richardson. Directora general del campamento.

Varios murmullos se hacen presente no haciendo incomodar para nada a la directora. Es más, nunca imaginé que los campamentos tuvieron directores o algo por el estilo, pensé que solo habían jefes, subjefes y guías.

–Tiene cara de zorra arrastrada– Susurra Sheyla masticando de su chicle– Cuanto que la mayoría ya se acosto con ella.

Madison suelta una pequeña carcajada junto a Aiden. Si, Aiden Hamilton, el bastardo con cerebro de nuez aún tiene el horrible descaro de sentarse en la misma mesa que yo y mis amigos, ¿por que no se va simplemente con Jayco y Ethan? Sin él, los tres mosqueteros no funcionan juntos o como mejor me gusta llamarlos. El trío perfecto de idiotas.

¡La Gran Mentira!© Donde viven las historias. Descúbrelo ahora