DOS

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No llevaban más de diez minutos cabalgando en silencio cuando el cielo se había cubierto de gris por completo para dar paso a una habitual y torrencial lluvia de verano.

Así que Harry aceleró un poco más el paso cuidando de que no fueran a resbalar por lo inestable del camino.

- Me estás haciendo daño.- Grace murmuró limpiando el agua que caía por su rostro viendo al jinete fijamente de reojo notando que este simplemente la ignoraba.- La hebilla de tu pantalón se clava mi espalda.

- Pues acomodate mejor.

- No importa como me acomode, tu pantalón me roza y me lastima.

- El campo no es para andar con vestiditos, toma esto como una lección, si vas a vivir aquí aprende a usar jeans de tela gruesa y brasier.

- Es verano.- Grace abrió la boca y luego la cerró nuevamente callando lo que iba a decir en ese momento cubriendo sus pechos con sus brazos, las gotas de lluvia habían empapado por completo la seda de su vestido y este se había pegado a su cuerpo de manera descarada.- Pervertido.

Harry ignoro sus palabras nuevamente y siguio con la vista fija en el camino, las lluvias y las altas temperaturas hacían que serpientes salieran a resguardarse sobre los árboles y rocas, lo menos que quiera en ese momento es que una apareciera y Black Beauty se asustara, era una yegua joven aún y aunque estaba entrenada no confiaba del todo en ella.

Disminuyó el paso cuando cabalgó sobre una parte del sendero lleno de lodo y apretó fuertemente las riendas con una de sus manos mientras que el brazo libre lo envolvía alrededor de la cintura de la chica.

- ¿Cuánto falta? -Esta se quejó en voz alta ganando un gruñido molesto de parte del ranchero.- Tengo frío.

- Deja de quejarte, llegaremos cuando tengamos que llegar.

- ¿No puedes ir más rápido?

- Si pudiera ir más rápido lo haría, no soy tan exigente pero me gustaría llegaras con vida ¿Y tu?

- Al menos podrías hablar, estar en silencio es aburrido e incómodo.

- Lo siento, no estudie para payaso así que si estás aburrida busca la forma de entretenerte sola.

-Eres la persona más mal educada que he conocido, pensé que la gente de pueblos pequeños era amable.- Grace se quejó nuevamente quitando las gotas de lluvia sobre sus ojos.- Detente un momento.

- ¿Para que?

- Quiero voltearme, me estoy ahogando porque me da la lluvia directo en el rostro.

- ¿Como te vas a voltear? -Harry detuvo el paso y la miro con curiosidad cuando ésta le pidió que la sujetará mientras que comenzaba a moverse.- ¿Que haces? No te pongas sobre mi es incómodo.

-Para mi es incómodo en otra posición.- Grace murmuró ignorando lo mientras que ponía cada pierna rodeando su cintura quedando cara a cara.- Así no me da la lluvia directo al rostro.

-No me gusta, vuelve a ponerte como estabas.

-No quiero.

-No te pregunté si querías.-La tomo nuevamente de la cintura pero está se aferró con más fuerza a el negando.

- No quiero, así es más cómodo para mí y más seguro, puedes ir más rápido y no voy a caer.

-Eres muy confiansuda.- Harry frunció el ceño mirándola, podía notar a simple vista que era una chica de ciudad.- Confiaste en mi sin pensarlo ¿Que harías si quisiera hacerte daño?

- Nada, eres por lo menos cuarenta centímetros más alto que yo y debes pesar como noventa kilos, si quisieras hacerme daño no habria nada que pudiera hacer para evitarlo.-Grace apretó sus brazos de manera descarada y sonrió cuando esté quito su mano.- Pero eres guapo y fuerte ahora que te veo más de cerca, no me molestaría si en este momento me quisieras llevar tras uno de los muchos arbustos para besarnos fogosamente.

Love in Texas  [H.S. Mature]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora