Capitulo 40

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Grace vio a Harry dormir junto a ella y frunció el ceño, no era normal que este durmiera hasta tan tarde y mucho menos que se viera tan cansado.

Tenía enormes bolsas bajo sus ojos y sus ojeras destacaban considerablemente ¿Que demonios le sucedía? Había dado vueltas por la cama toda la noche así que dudaba que este hubiera logrado dormir algo del todo bien, cogió la sábana de encima y se envolvió en ella poniéndose de pie para abrir las ventanas y que corriera algo de aire fresco, dió una mirada hacia fuera y frunció el ceño al ver marcas de ruedas de un vehículo grande sobre los rosales que se había encargado de cuidar religiosamente cada mañana, y que ahora no importaba porque estaba totalmente destruido.

- Harry.- Apoyo sus rodillas sobre la cama y lo movió bruscamente soltando un grito agudo cuando de un momento a otro tenía un arma en su frente y el ojiverde la miraba con la respiración completamente agitada.- ¿Que demonios te sucede? ¿De dónde sacaste esa arma? - Chillo golpeando la mano de este para que dejara de apuntarla.

- ¿Grace? Cariño, lo siento mucho.- Se sentó sobre la cama soltando el arma mientras que secaba el sudor de su frente con el antebrazo mientras que veía la completa claridad que le daba el día.- ¿Que hora es? - Intento regular su respiración.

- Más del medio día.- Rodó los ojos.- ¿Desde cuándo duermes con un arma bajo la almohada?

- No duermo con un arma bajo la almohada.- Se defendió a si mismo tomando está y quitándole las balas, incluso la que estaba en la recámara lista para disparar.- La pongo en el suelo, junto a la cama.

- No quiero un arma en mi habitación, o en mi casa.

- Técnicamente es mi casa.- Harry hizo una mueca al notar que sus palabras no estaban sirviendo de mucho, y que mejor dicho estaba empeorandolo ya que está ahora se veía realmente enfadada.- Lo siento.

- Me apuntaste con un arma cargada, a la cabeza.

- No debiste despertarme tan bruscamente, fue un mal reflejo.- Se puso de pie dejándola de rodillas en la cama mientras que cogía la ropa del día anterior y comenzaba a vestirse.

- Puedo haberme costado la vida, ya no me siento segura aquí sabiendo que hay un arma y que tú cada día actúas más extraño alrededor de todo.

- Nunca te haría daño.

- Puede que no intencional, pero los accidentes pasan y está vez me he salvado por un pelo.

- Lo siento ¿Si? Fue un error, seré más cauteloso desde ahora en adelante ¿Podemos olvidar esto e ir a desayunar? Tenía que ir al rancho Payne está mañana y me quedé dormido.

- ¿Te vas a deshacer del arma?

- Grace...- Sería fácil aceptar si así lo considerará conveniente, ya que tenía armas por toda la casa pero aún así se sentía seguro si tenía una al alcance de su mano por las noches.

- ¿O al menos le buscarás un lugar lejos de mi? Si la vuelvo a ver otra vez tendrás que sacarla de casa.

- Lo prometo, será la última vez que tengas que verla.

- Bien.- Asintio aunque no estaba del todo satisfecha.- Me iré a tomar una ducha.

- Te acompaño.

- No, necesito pensar un poco.- Dejo caer la manta sobre la cama y bajo de esta desnuda con el móvil en la mano.- Voy hacer unas llamadas, así que no me interrumpas.

- ¿A quien vas a llamar? - No lo haría a su padre ¿Verdad? Harry nunca había sido enfrentado con un suegro así que no sabía cómo manejar a uno y entraba en pánico de solo pensar que una mala palabra o algún comentario fuera de lugar jodiera todo, sabía lo mucho que Grace lo quería así que más le aterraba que este cuando lo conociera no lo aceptará.- Grace, te estoy hablando.- Murmuró cuando está paso de largo junto a él, sin poder evitar mirar sus nalgas desnudas y sus pechos cuándo está volteo a verlo.

Love in Texas  [H.S. Mature]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora