Love in Texas [H.S. Mature]

DIEZ

Harry sonrió bebiendo un sorbo de su café en completa tranquilidad, aunque este era descafeinado no tenía queja alguna con el sabor ya que era realmente muy parecerido al que solía beber habitualmente con toda esa cafeína, era el segundo día que estaba libre de Grace. La adolescente se había recluido a si misma en su habitación y aunque no sabía porque al ranchero no le molestaba eso, era la tranquilidad que tanto extrañaba y necesitaba.

Era una mañana tranquila, había podido fumar un cigarrillo luego del café y se había comido media toronja con azúcar, mucha azúcar. Ahora se dirigía a su despacho para terminar de revisar unos documentos atrasados sobre las finanzas del rancho, si no estaba todo en orden no sabía si tenía dinero para comprar más ganado y la temporada de crías se acercaba y le había hechado un ojo a un toro semental hijo de un campeón de rodeos.

Iba hacer un dineral con el si lo conseguía, por qué iba a valer cada centavo invertido.

Abrió la puerta que daba a su despacho y tosió maldiciendo en bajo cuando vio a la última persona que quería ver husmear en su escritorio.

- ¿Que hacés, Grace? - Suspiro entrando.

- Estoy buscando algo.

- Lo se, lo noté pero ¿Porqué buscas en mis cosas? - Frunció el ceño.

- Por que aquí debe estar lo que busco.- Apunto como si fuera lo más obvio revolviendo los cajones.

- ¿Que buscas?

- Una carta.

- ¿Una carta? - Camino hacia ella haciéndola a un lado mientras que comenzaba a organizar todo nuevamente.- ¿Que carta?

- Cualquier carta.

- ¿Porqué quieres una carta? - Cubrió su rostro respirando profundamente, no creía llegar algún día entender a las mujeres o a ella precisamente.

- Quiero saber la dirección exacta de aquí para el correo.- Tomo un sobre y lo miro unos dejándolo caer al suelo cuando notó que este no le serviría para nada ya que estaba en blanco.

- Me podías haber preguntado ¿Sabes? No haber husmeado en mis cosas, es de mala educación meter las narices en los asuntos de otras personas.

- Lo se, pero era más divertido husmear.- Saco un trozo de goma de mascar que había sobre el escritorio llevándolo a su boca haciendo un globo con ella después reventándolo.- Dame una carta.

- No llegan cartas aquí, las que tenía ya se fueron a la basura.- Harry se dejó caer sobre su asiento.- Tengo una casilla postal en la agencia de correo en el pueblo dónde me llega todo, voy una vez al mes a buscarlas.

- Okey ¿Cuál es la casilla?

- Es mi casilla.

- Pero necesito ropa, mucha ropa y necesito que me la envien aquí.

- En el pueblo hay tiendas, ve y compra en ellas.

- Pero son tiendas de segunda mano seguramente o tiendas con todo pasado de temporada y sin estilo.- Se quejó dramáticamente haciendo un puchero.- Yo necesito ropa a la moda, nueva y bonita que vaya conmigo.

- Okey.- Asintió tomando una hoja de papel y un lápiz escribiendo la información de la casilla postal para ella, ya que no tenía ganas de discutir por tales estupideces.- Ten. - Le entrego.

- Gracias.- Grace salto de felicidad en el lugar donde estaba parada sin dejar de ver al ranchero fijamente.

- ¿Necesitas algo más? - Este murmuró al ver que no se iba bajando la mirada a los documentos frente a él, si la ignoraba lo mas probable era que se fuera.- Ya te di lo que querías.