EL POMBERO

1.7K 77 83
                                    


Cuando pensamos en criaturas fantásticas, automáticamente nos llegan a la mente los nombres más vistos y clásicos: hadas, dragones, vampiros, duendes, etc. Pero cada cultura tiene sus propias bestias, sus mitos y sus leyendas. A veces varían según el país o la época, en ocasiones tiene que ver con una zona geográfica pequeña o con una religión. Y, como si eso fuera poco, una misma criatura puede variar en su definición según a quién se le pregunte.

En FantasiaES se nos ocurrió que podríamos presentarles poco a poco a las distintas criaturas que habitan en tierras hispanas a través de entradas breves e informativas. Por eso hoy les traemos al Pombero, habitante del norte de Argentina, de Brasil y de Paraguay.

 Por eso hoy les traemos al Pombero, habitante del norte de Argentina, de Brasil y de Paraguay

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¿Quién es el Pombero?

El Pombero es un pariente del duende, una figura antropomórfica de escasa estatura. En palabras simples: un hombrecito enano.

Más allá de las distintas versiones, en todas se coincide en cuanto a su aspecto feo y desagradable. Fornido y peludo, de brazos largos y pisadas silenciosas.

En algunas zonas se dice, además, que puede volverse invisible.

En algunas zonas se dice, además, que puede volverse invisible

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¿De dónde nace la leyenda?

El Pombero tiene origen guaraní y se considera como un "asustador". En esta versión —la más antigua—, sus pies están hacia atrás, invertidos, para poder desorientar a quien quiera perseguirlo.

Se cree que la leyenda nació a causa de un nativo real y deforme que fue exiliado de su tribu y que, en venganza, los molestaba al asustar a los animales y robarse la comida. 

Con la colonización española y la imposición del catolicismo, se creó una nueva versión del mito en que el Pombero es un diablillo, un enviado del demonio.

Como una curiosidad, los araucanos en la frontera de Argentina con Chile tienen su propia versión (aunque menos conocida) del Pombero que se llama Peukén.

Otras versiones de esta criatura son conocidas en Sudamérica como Pyrague (pies peludos), Karai Pyrahe (Amo de la noche, así lo suelen llamar en Paraguay), Kuarahi Jará/Cuarahú-Yara (Amo del sol en guaraní), Cho Pombe/Chopombé.

Otras versiones de esta criatura son conocidas en Sudamérica como Pyrague (pies peludos), Karai Pyrahe (Amo de la noche, así lo suelen llamar en Paraguay), Kuarahi Jará/Cuarahú-Yara (Amo del sol en guaraní), Cho Pombe/Chopombé

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El mito más conocido

El Pombero viaja por su territorio casi sin detenerse porque su misión es cuidar la naturaleza (flora y fauna). Permite la cacería y la tala humana por necesidad, pero no acepta excesos. A quienes se aprovechan de la naturaleza, los castiga.

Según diversas versiones de la leyenda, sus castigos pueden ser jugarretas (como dejar al humano muy lejos de su casa y que tenga que volver a pie), violencia física (dicen que puede chupar sangre como un vampiro, dar golpes e incluso matar), daños materiales (incendios de casas) o incluso maritales (robo y violación de las mujeres y de las hijas de los infractores).

Luego de la instauración del cristianismo, se le concedió también el castigo de dejar embarazadas a las mujeres infieles, a las que no están bautizadas y a las que duermen desprotegidas fuera de sus casas. Se lo comenzó a reconocer como a un ser lascivo y perverso.

El Pombero es a veces amigo y a veces enemigo de los hombres. Este es un concepto presente en todas sus versiones.

Si los humanos le hacen ofrendas que son de su agrado, el Pombero les permitirá vivir en armonía, cazar en los bosques, estar protegidos de otros humanos y tener una cosecha fértil.

Las ofrendas deben dejarse durante treinta días seguidos fuera de la casa y debe recitarse una oración breve para que él sepa que debe ir a recoger sus obsequios. Sus ofrendas preferidas son la miel, el tabaco y el alcohol.

Si se hace una promesa con el Pombero y luego se rompe, este duendecillo se encargará de que el humano se arrepienta. La enemistad del Pombero llevará a que sucedan cosas extrañas (ruidos en la noche, objetos que se mueven y demás) hasta que el humano se arrepienta, se vuelva loco o muera.

Algunas versiones dicen que el Pombero puede ayudar en la búsqueda de objetos perdidos y es por ello que en el norte de Argentina y en algunas partes de Paraguay hay quienes recitan: "Pomberito, Pomberito. Si me ayudas a encontrar (objeto), yo te ofrezco tabaquito".

 Si me ayudas a encontrar (objeto), yo te ofrezco tabaquito"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


¿Conocías al Pombero? ¿Qué piensas del mito?

¿Alguna vez leíste algo en donde se lo mencione?

¿Qué otra criatura mitológica hispana te gustaría ver en nuestro perfil?

*Las imágenes fueron tomadas de Google.

Bestias de ensueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora