[ You Are Mine Until Death ] [Historia En Pausa]

∆5∆

     Estaban de nuevo en la casa del mayor viendo una película y disfrutando ese momento.

— ¿Te soy de utilidad?— Fred miro a Gold algo confundido.

—No, aún no—respondió—ya te dije que lleva tiempo—

—¡Agh!, no entiendo a qué te refieres con ser util— murmuró para si mismo.

"Pum"

—¿Que fue eso?— Fred se levantó del sofá—sonó fuerte, como un golpe—

—Alo mejor algo se cayo— se levantó y sentó al menor—Tranquilo, yo iré a revisar—

—Puedo ir yo si eso te es útil—

—No, aún no—le dió un beso en la frente—Solo tranquilízate, no pasa nada malo— le acarició la mejilla—No tardaré—

—Esta bien—sonrió levemente.

   Fred se acomodó para seguir viendo la tele, mientras tanto el albino fue al cuarto donde estaba la puertilla al sótano, abrió está y bajo las escaleras hasta estar en el sótano, se acercó a una mesa y tomo un pequeño martillo, luego fue a otra puerta en el sótano que fácilmente se perdía con el color de las paredes, abrió y observo a la mujer atada en el piso.

—Tienes que hacer silencio cuando hay visitas— golpeó el martillo en su mano mientras se acercaba—Si te estuvieras quieta no tendríamos este problema— la jalo del cabello pegando la en la pared—No tendría que hacer esto, aunque... Lo agradezco de cierta forma—

   Alzó el martillo y golpeó la espalda de la chica quien se retorció de dolor, no pudo ni gritar, sintió algo doler en su interior, probablemente le rompió algún hueso.

—Deberías aprender de ella— señaló un cadáver femenino que estaba aún lado de ellos— Ella se está quieta y no molesta—

   Le dió unos cuantos golpes y luego la tiró al piso para darle dos patadas, mientras la chica sollozaba, el mayor acomodo su ropa y volvió a subir dónde estaba su visita, cerró la puertilla y fue a la sala, pudo ver a Fred totalmente concentrado en la película, al parecer ni cuenta se dió. Se acercó y se sentó a su lado, paso su brazo por detrás y lo abrazo.

—G-Gold— sus mejillas adaptaron un color rojizo.

—¿Que pasa?— hizo un poco más fuerte el abrazo.

—N-No nada— se acomodó entre sus brazos— me gusta estar asi—

(∆=∆=∆)

    Después de unas horas el azabache había caído profundamente dormido, estaba cansado de hacer proyectos y además últimamente salía mucho con Gold a cualquier lado. Le alegraba que estaban siendo como una pareja de enamorados que salía a menudo en citas, el problema es que aveces estaba incómodo, se sentía manipulado y que trataba de imponerle cosas, una que otra vez lo negaba pero... De alguna u otra forma le daba algún argumento que lo convencía de que no hacían nada malo.

    No era tanto que el mayor lo agrediera o algo por el estilo, simplemente sentía que lo quería controlar a través de palabras bonitas y de que le sería útil, ese era el argumento que más le retumbaba en la cabeza últimamente y empezaba a repetirse esa palabra mentalmente cada que hacía algo, era pensamientos como: "¿Si hago esto le seré útil?", "¿Esto le alegrará o lo molestará?", "¿El realmente me enseña a ser útil?", "¿Porque utiliza la palabra útil?", "¿Soy útil?", "¿Soy útil para las demás personas?". Llegaba puntos en donde solamente quería olvidarse de todo pero una voz en su cabeza empezaba a repetirse que no lo era, sobretodo cuando Gold le reclamaba su comportamiento "inútil" de forma disimulada.