Capítulo 14

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Salí y me metí en el auto de la Sra. Iero, que Frank estaba conduciendo. Él sonrió, dándome un beso.

— ¿Cómo estuvo tu sesión hoy? — Preguntó.

Me encogí de hombros y él sonrió tranquilizadoramente.

— Mi mamá está haciendo espaguetis para la cena — dijo — Y compré más Sprite también.

Nos llevó de vuelta a su casa de mi sesión de terapia, una mano en el volante y la otra en mi muslo.

— ¿Quieres hablar de ello? — Preguntó y negué con la cabeza — Está bien, no tienes que hablar conmigo si no quieres, pero quiero que hables con tu psicólogo. Quiero que te sientas mejor.

— Sé que lo haces — dije en voz baja.

— No quiero que te sientas presionado por mí ni nada, solo tómate tu tiempo — dijo — Sé que es un proceso largo y difícil, pero estarás bien, sé que lo estás.

— Sé qué más es largo y difícil — murmuré.

Frank resopló, dándome un pequeño apretón en el muslo.

— También alquilé algunas películas en mi computadora portátil — dijo.

Sonreí suavemente, apoyando mi mano en la suya.

— Eso suena muy bien ahora — dije.

Él sonrió y llegamos a casa, sentados en su mesa. Su madre ya había hecho la cena.

— ¿Estás bien, Gee? — Ella preguntó. Me encogí de hombros suavemente y ella besó la parte superior de mi cabeza, sentada frente a nosotros.

— ¿Tienes tarea que hacer este fin de semana, Frank? — Preguntó la señora Iero.

— Sólo un poco — dijo Frank.

— Bueno, asegúrate de que lo hagas — dijo ella.

Frank asintió, tomando un bocado de su comida.

—¿Cómo va la escuela, Gee? — preguntó ella.

— E-está bien, supongo — murmuré.

Miré hacia abajo, dando un pequeño mordisco. No tenía mucha hambre, pero sabía que Frank querría que comiera, simplemente no tenía apetito. Solo quería acostarme en la cama escuchando música o algo así.

— Está bien, vamos a ver películas o algo así — dijo Frank cuando terminamos de comer.

— Está bien, simplemente no te quedes despierto hasta tarde — dijo la señora Iero.

Asentimos y subimos a la habitación de Frank. Agarró su computadora portátil y me llevó a la cama con él para acurrucarme.

— Eres tan lindo — murmuró, cepillando mi cabello detrás de su oreja.

Me sonrojé suavemente y él besó mi mejilla. Envolvió sus brazos alrededor de mí y comenzó a jugar una película, que ahora vi era Jaws.

— Frank, ¿por qué sigues saliendo conmigo? — pregunté. — Sólo traigo problemas.

— No, eso no es cierto — negó — Eres perfecto. Y realmente me gustas mucho y quiero estar contigo por mucho, mucho tiempo.

Lo mire mientras sonreía suavemente. Apoyé la cabeza en su hombro y lo sentí envolver sus brazos alrededor de mí. El calor irradiaba de su cuerpo y me incliné más cerca mientras zumbaba.

Besó la parte superior de mi cabeza y sonreí. Frank pasó sus dedos por mi corte de pelo sosteniéndome fuerte en sus brazos. Me sentí tan segura en sus brazos, me encantó estar aquí con él.

Fifteen Minutes  || FRERARDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora