Manipulación

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“A veces las personas jamás cambian, solo aprenden a mentir un poco mejor"…

Capítulo 13:
         

Jeremy:

Abrí uno de mis ojos, intentando no quejarme por el insoportable dolor de cabeza que traía, en realidad me dolía todo el cuerpo, estaba molido,  no se con exactitud a que hora logre dormirme, pero seguramente me habría ganado el cansancio,  una ca...

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Abrí uno de mis ojos, intentando no quejarme por el insoportable dolor de cabeza que traía, en realidad me dolía todo el cuerpo, estaba molido,  no se con exactitud a que hora logre dormirme, pero seguramente me habría ganado el cansancio,  una cama dura y sucia, un cuerpo adolorido y un ojo reventado, casi sin poder abrirlo por la hinchazón, no podía estar peor.

Tocando la parte de atrás de mi cabeza, gruñí al sentir un chichón,  maldición,  terrible golpiza me habían dado, no solo me la gané en aquel bar de mala muerte, si no que unos de los policías me había dado un macanazo en la cabeza cuando me negué a entrar en mi celda, la policía había echo un abuso de poder impresionante conmigo.

–Bien señor Collins, ya puede irse– Me informo un oficial abriendo mi celda, ¡gracias al cielo!, ¡por fin!, había pasado la peor noche de mi vida, sin embargo no podía estar del todo contento al recordar como a mi novia, una vez más, le importaba tres hectáreas de verga mi paradero. Sin olvidarme que a esta altura, mi rostro debía estar desfigurado.

Salí de allí caminando a paso lento, joder, me dolía todo, desee nunca haber entrado a buscar a Lena a ese lugar.

Sorpresa me lleve al encontrarme justamente a la susodicha esperándome en la recepción de la comisaría, mi humor cambio para peor, no tenía deseos de verla aquí.

–¡Oh por Dios! ¡Jeremy! …¡Ay Jeremy! lo siento tanto– dijo acercándose a mi, tomándome del rostro e inspeccionando mis heridas, como si le importara.

Con brusquedad me saque sus manos de encima y mirándola disgustado, simplemente me aleje de ella, siguiendo mi camino, no quería hablar ni mucho menos iniciar una discusión aquí mismo. No volvería a pasar otra noche entre rejas.

–Jeremy, disculpa, no supe que hacer, yo…– Intento disculparse.
Caminó tras de mi hasta que tomándome del brazo dijo:
–¡Oye!, ¡Escúchame!- Girando sobre mis talones, voltee a verla solo para decirle:

–¿Podrías llevarme a casa por favor?– Quedándose muda un momento, finalmente asintió con la cabeza y camino hacia el auto.

Durante el viaje de regreso intentó entablar una conversación, disculpándose no se cuantas veces, pero realmente no estaba prestándole la más mínima atención, solo quería llegar a casa, darme un baño y descansar,  pero como era de esperarse, la intensa Lena, no iba a permitir que la ignorara, por supuesto que no, enfadada, frenó el auto a mitad de camino y dijo:

–¿Podrías dejar de hacer como si  no existiera?– Se rascó la cabeza varias veces antes de proseguir. Se la notaba nerviosa –Es que no lo soporto, realmente ¡Me desespera!, al menos, insultame, grítame, pero ¡di algo!– Se quejó, tomando una gran bocanada de aire para luego expulsarla con fastidio –No quería que todo esto ocurriera, no supe que hacer entre en shock, solo dime que sientes– Suspirando y desganado le respondí:

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