Después de un final en el que las cosas no terminaron bien para Alex y Piper, está claro que el destino no permitirá que se separen...
Al paso de unos años, ¿seguirá tan latente ese amor que se juraron?
Segunda parte de "PLEASE, DON'T LEAVE", de ést...
Después de la graduación de Pipes habíamos acordado que ella viniera a pasar unos días conmigo en mi departamento, así que a penas estuvo libre de sus actividades en cuestión del papeleo de la universidad, le dije que iría a buscarla por aquello de las 6pm, por fin haciendo uso del jet privado que me había empeñado en comprar. Los abogados se habían puesto en contacto con Bill respecto al asunto de Celeste, y debo decir que no le pareció en absoluto lo que estábamos haciendo, por ello, decidió que prefería ir a la Corte antes de arreglarse con mis abogados... Eso era un trago amargo para mí, porque realmente quería evitar todo tipo de confrontamiento con los Chapman, en especial con él, pero de ninguna forma quería ceder, y supongo que se lo había tomado personal quizá conmigo, solamente para demostrar el poder que él tenía... Estaba sentada tras mi escritorio con una taza de café girando en él... Movía el aza de un lado a otro tratando de disipar mis nervios hasta que llegara la hora de salir y poder ir a recoger a Pipes, me habría ido antes, pero había una serie de cosas que poner en orden en cuanto al jet, así que a penas la piloto McCullough me avisara, podríamos salir. Nicky la había contratado porque según su currrículum y entrevista, estaba bastante calificada, además de que era discreta... La chica era guapa, no puedo negarlo, rubia, ojos bastante azules, delgada, tez blanca, un par de gafas... Pero en sí nada fuera de otro mundo... Aunque solo por mi descripción sonaría igual que mi Pipes, pero no había comparación. Además la chica era bastante bajita, y su nombre era raro: Artesian McCullough. La había visto a penas un par de veces, una cuando Nicky me hizo hojear el currículum y en la parte superior izquierda venía una pequeña fotografía de ella. Y la segunda, cuando me la presentó oficialmente como mi piloto privada. La chica se puso sumamente nerviosa y sonrojada, aunque yo no hice más que darle la bienvenida y estrechar su mano.
Mi taza de café seguía girando en todas direcciones con desesperación, hasta que en un mal movimiento terminé derramándola sobre el escritorio y sobre mí. El líquido caliente cayó sobre mi abdomen y piernas haciéndome parar de inmediato.
*Alex: -¡Mierda!- incluso mi silla y la alfombra se mancharon. Presioné el botón del intercomunicador para hablar con Taystee. -¿Podrías traerme un cubo de agua y algo con qué limpiar? He derramado café... Mierda, mierda, mierda...- dije quitando todos los papeles que pude del escritorio.
*Taystee: -¿No prefiere que llame a mantenimiento?-
*Alex: -No Taystee, por favor... Solo consigue lo que te pedí...- me enfurruñé intentando secar con Kleenex hasta que mi secretaria atravesó la puerta con una cubeta con agua y algún líquido limpiador, un par de guantes, un cepillo y un trapo.
*Taystee: -Permítame señorita Vause, yo lo hago...-
*Alex: -No era mi intención Taystee... Yo lo limpiaré, quizá así aprenda a ser más cuidadosa...- ella solo se rió y me hizo a un lado para comenzar a limpiar la alfombra. La puerta había quedado entreabierta, así que, por la ausencia de mi secretaria en su lugar y la accesibilidad de mi puerta, el caso se volvió un acceso automático. Vi una cabellera rubia asomarse, seguida de una sonrisa que sin pensar mucho correspondí.
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