9 meses después, junio.
*****Narra Ashley*****
Han pasado nueve meses. Nueve meses desde aquella noche con mis amigos. Nueve meses que Sarah y yo llevamos esperando para ir a Tomorrowland. Nueve meses desde que salgo con Blas. Nueve meses desde que me desvirgó.
Han pasado tantas cosas estos meses... El director no ha salido de la cárcel, he recuperado gran parte de mi relación con mi madre. Desde que llegó a casa, incluso se preocupa por mi, y estos meses hemos ido puliendo nuestra relación madre-hija, al igual que Sarah y Blas con sus padres biológicos.
Y lo mejor de todo. Mario, Alex y los padres adoptivos de Sar y Blas no han vuelto a aparecer, y ese cambio se nota, mucho.
Hoy, es el día de la graduación. Los chicos, Sar y yo nos graduamos. Mi mejor amiga y yo llevábamos siglos preparando este momento, y sobre todo, las maletas para irnos a principios de julio al continente europeo, a Bélgica, donde se encuentra el tan famoso festival al que le falta menos de un mes para empezar.
Aquella noche, me sentí tan mal. Juzgué a Dani sin saber lo que realmente planeaba, no entiendo qué pudo pasarme para pensar eso. Me tiré llorando a sus brazos y él me acogió con mucho gusto entre ellos, ante la atenta mirada de Blas, David, Carlos y Álvaro. Sarah se quedó en shock más de diez minutos.
Blas dice que me va a echar muchísimo de menos, pero yo le consuelo diciéndole que es solo un mes, algo menos, que no nos veremos, pero por algo existe el Skype, el WhatsApp... Y él simplemente asiente entre lágrimas. Recuerdo que una vez, estábamos en la cama, me abrazó y me susurró al oído que no le dejara nunca, que era su oxígeno, y que le iba a costar desprenderse de mí un mes, pero que cuando volviéramos, lo celebraríamos a lo grande.
Y sí, ya sabéis todos a lo que se refería con esa frase.
Tengo las maletas preparadas en la casa de Sarah, que es donde actualmente vivo. Vivo aquí porque mi madre se ha traído un novio a casa y precisan intimidad. Ella a mi me dio tres meses, dejémosla.
-Es 27 de junio...- repito sin parar frente al espejo.
En media hora tengo que estar en el instituto y aún estoy esperando a Blas para que me lleve en coche. Llevo un vestido azul celeste corto, por encima de la rodilla, que me hace juego con los ojos (y,¿por qué no decirlo, con los de Blas también), tacones blancos no muy altos y no llevo bolso, voy simple y cómoda.
Sarah se fue hace exactamente diez minutos, en el coche de Álvaro, que va guapísimo con su traje negro.
Llaman al timbre y bajo aferrada a mi salvación: la barandilla.
Abro la puerta y veo un Blas con otro traje negro, igual al de Álvaro, y de David, éste último me ha mandado una foto por WhatsApp.
-¿Os habéis puesto los cinco de acuerdo para llevar el mismo traje?- digo, sin apartar la vista de sus preciosos ojos. Sin embargo los suyos me recorren de arriba a abajo una y otra vez, hasta que reacciona y me besa.
-Sí, se le ocurrió a Dani.
Nos subimos al coche y en menos de diez minutos estamos allí.
Pasan las horas. Ya me han dado la el graduado y todos los graduados nos hemos hecho una foto, Blas y yo salimos besándonos, al igual que Sarah y Álvaro.
Y llega el momento que mi gran amiga y yo hemos estado esperando.
La fiesta de despedida.
Mi chico y yo nos subimos en su Ford Fiesta y ponemos rumbo a la casa de Álvaro.
En el camino recibo un mensaje de mi madre.
-Hija, esta noche no estoy en casa, me han llamado desde California. La sucursal ha tenido un grave problema, en cinco días estaré en casa. No llegues muy borracha, y disfruta.
-De acuerdo mamá, te quiero.
Apago el móvil, ya hemos llegado.
*****Narra Sarah*****
-Por fin. Es 27 de junio. Llevo esperando este día con Ashley durante años. Va a ser el mejor día, y la mejor noche de mi vida- digo frente al espejo, completamente mojada.
Acabo de salir de la ducha y observo mi vestido, rojo, por encima de las rodillas, parecido al de Ashley. Obviamente cojimos unos parecidos porque así nos demostrábamos que siempre estaremos juntas para todo.
En estos nueve meses he sido tan feliz... Rodeada de tantos amigos y alejada de malas compañías...
Me enrollo una toalla alrededor y salgo del baño, con cuidado de que Ash no me vea , ya que vive en mi casa porque su madre necesita la suya, y camino hacia mi habitación, donde veo sus maletas para irnos mañana a Bélgica.
Decidimos pasar allí varias semanas para descansar de Nueva York, buscamos un apartamento de alquiler y, por suerte, encontramos uno muy bajo de precio, nuestro casero es norteamericano, así que no habrá problemas con el idioma.
Me visto y me maquillo cuidadosamente y justo llaman al timbre. No me cuesta imaginar quién es. Bajo las escaleras y ahí está, con su traje negro, su peinado hacia arriba, con esa sonrisa, elegante, mi novio, Álvaro.
-Hola, princesa.- me sonríe.
Río y me tiro a sus brazos, haciendo que nos fundamos en un largo y apasionado beso.
La fiesta de esta noche es en su gran casa, pero vamos a ir juntos a la graduación. Allí nos reuniremos con el resto.
-Hola, Ash- Álvaro me interrumpe mis pensamientos al saludarla, va vestida con un vestido azul celeste, preciosa.
-Hola, Álv- se acerca y le da un abrazo-. ¿Habéis visto mis pendientes de aro? Los tenía en una mochila y no los encuentro...
Asiento, subo a mi cuarto con ella siguiéndome, y le doy sus pendientes, que estaban encima de mi escritorio.
Me marcho con Álvaro a la graduación, él es tan perfecto...
Pasan las horas y todo acaba, tenemos todos nuestro graduado y nuestra foto grupal.
Álvaro me coge y me lleva hacia su coche, la fiesta es en su casa.
-¿Lista para la mejor noche de tu vida?- asiento y le beso como nunca antes.
LO SENTIMOS. HEMOS TARDADO MIL, PERO AQUÍ TENEIS LA PRIMERA PARTE DEL FINAL DE LA PRIMERA TEMPORADA. GRACIAS POR ESTAS CASI SIETE MIL VISITAS. BESAZOS!
TeamOf2
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Peligrosa Elección
RomanceSarah y Ashley tienen la vida del perro, beben alcohol, tienen resacas hasta en sueños, no estudian, se mantienen en el suficiente, pero a sus vidas llegarán personas que harán que éstas den un giro de 360°.