Capitulo 18

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La primera pelota dio en el borde del blanco, pero no con la fuerza suficiente para soltar el asiento.

—Vamos, puedes hacerlo —lo alentó ________, evitando mirar a Zayn mientras el chico se preparaba para su segundo tiro.

—_______—la llamó Zayn.

El adolescente se detuvo.

—Por cada chico al que animes a hundirme —continuó Zayn—, compraré una pelota cuando tú estés aquí. Y no pienso fallar ni una sola vez.

Todos los de la cola rieron.

—Eso podría costarte mucho dinero —replicó ella—. Y además, no me gustaría que te hicieras daño en el hombro con el esfuerzo. De hecho, voy a hacer un cartel de advertencia, porque ahora que lo pienso, los jubilados no deberían jugar en esta atracción. Es muy peligroso para su salud.

Más risas.

A Zayn se le dibujó una sonrisa perversa.

—No te preocupes por mi salud, cariño. Yo estoy en muy buena forma.

Las hormonas de ______ se descontrolaron totalmente. ‘Cariño…’ Le fue de poco que las piernas volvieran a fallarle.

El adolescente lanzó su segunda pelota y dio de lleno en el blanco.

Los niños saltaron de alegría al ver caer a Zayn y cuando volvió a la superficie, se sacudió el pelo y miró a ______ directamente, que por dentro no hacía más que rezar para que el chico volviera a hacer aquel gesto con el pelo. Él siguió mirándola mientras se empujaba hacia arriba para volver al asiento. Mojado y reluciente, con el aspecto del dios pagano del pecado y mirándola con ojos brillantes, Zayn sonrió con malicia.

_______ tragó saliva e hizo pasar al siguiente.

Una joven que lo miraba con tanto deseo como ella le dio los billetes, se humedeció los labios y se aseguró de estar tan cerca de la línea como pudiera.

—No me voy a mover de aquí hasta que lo tire —le dijo a _______—. No me importa cuánto dinero me cueste.

Le costó cinco dólares. Y esta vez, cuando Zayn volvió al asiento, miró a ______ y murmuró:

—Dos.

Ella parpadeó.

—Has conseguido que me tiren dos personas —le aclaró él—. No creas que he olvidado mi promesa.

—Es mi trabajo.

No obstante, _______ procuró no animar a la siguiente joven de la cola y respiró aliviada cuando falló. Pero entonces apareció la niña más adorable del mundo. No tendría más de cuatro años, y tenía el pelo negro y largo, y los ojos más oscuros que _________ había visto en toda su vida. Iba de la mano de una mujer que llevaba una acreditación de voluntaria de la fundación a la que ‘One Direction’ se había ofrecido a ayudar.

—Es una de nuestros niños —dijo la mujer—. Thelma vive en un hogar cercano al centro recreativo, y parte del dinero que ganemos se dedicará a comprarle juguetes.

_______ miró a la niña a los ojos y sintió que se le partía el corazón.

—En ese caso, cariño, invito yo.

—¿Me das una pelota?

—Te daré todas las que necesites para tirar a Zayn al agua.

________ se sacó veinte dólares del bolsillo para sumarios a la recolección del día. Después alzó a Thelma, se la apoyó en la cadera, tomó la canasta con las pelotas y cruzó la línea de lanzamiento.

—Húndelo —dijo.

Thelma rió divertida y lanzó la primera pelota, que fue a parar a menos de un metro.

_______ se acercó más al blanco y miró a Zayn a los ojos. Él arqueó una ceja.

—¿Tres, ________?

Ella levantó la cabeza y animó a la niña a tirar otra pelota. Thelma falló, y _______ siguió avanzando hacia el depósito de agua.

La multitud reía a carcajadas. Zayn parecía inquieto y resignado a la vez.

El tercer tiro fue precioso. Thelma dio en el blanco, y Zayn se dio otro chapuzón. Pero en lugar de volver al asiento salió del barreño y, sin siquiera tomar una toalla, fue directo hacia _______, que estaba a punto de dejar a la niña en el suelo. Al verlo acercarse, sintió que no le convenía soltarla.

—Thelma, ¿qué te parece si vamos a…?

—Hola —dijo Zayn, agachándose para mirar a la pequeña a los ojos—. ¿Sabes quién soy?

—Sí. Mi hermana mayor dice que eres su novio.

Zayn soltó una carcajada, igual que los que estaban a su alrededor. Incluso ______ fue capaz de sonreír.

—Bueno, ¿Sabes que voy a hacer ahora?

La niña negó graciosamente con la cabeza.

-Voy a hacer volar a la preciosa dama que te tiene en brazos. Directa al agua, ¿Quieres verlo?

Thelma aplaudió encantada.

A _______ se le aceleró el corazón.

—Bueno, no creo que Thelma quiera bajar…

La niña estiró los brazos hacia Zayn, que, mojado y todo, la alzó y sonrió enternecido.

—Esta es mi chica. ¿Me quieres ayudar?

Thelma asintió, y todos miraron a _______ con expectación.

—No creo haber accedido a sentarme ahí —dijo ella, mirando de reojo el agua helada—. Estoy segura de que sólo dije que iba a ayudar.

—Sí, y esto va a ser de gran ayuda —replicó Zayn—. Verte en biquini y mojada me ayudará enormemente. Salvo que tengas miedo, claro. Estoy seguro de que los chicos entenderán que no quieras…

—Está bien.

________ se bajó la cremallera del vestido, se lo quitó y se lo lanzó a Zayn que lo atrapó con una sonrisa, encantado de verla con aquel biquini blanco. Se recogió el pelo con una coleta y, antes de darse la vuelta, miró a Zayn una vez más.

Al ver la pasión y el hambre con que la miraba, el corazón le dio un vuelco.

—No te preocupes —le dijo él—. El agua sólo está un poco fría.

—Gracias.

Sedúceme *Zayn Malik*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora