La Venganza (Justin&Tu)

Capitulo 10 [parte 1/2]

"La venganza"

Capítulo 10 Parte 1/2

Me desperté de mis horribles sueños febriles causados por la inconsciencia y el horror contenido en mi mente gracias a una jarra entera de agua helada arrojada directamente a mi rostro. Abrí los ojos inmediatamente y me encontré con otros ojos color miel mas intensos. Al principio me asusté porque pensé que era Justin, pero luego miré su cara y me encontré con Kylie, la melliza de mi captor.

-Ky... Kylie, ¿qué haces aquí?- le pregunté aún medio inconsciente.

-Yo vivo aquí, _____- me contestó como si fuera la cosa más obvia del mundo.

-Oh, cierto...

-Estoy aquí porque aunque hayas maltratado y acosado a mi hermano durante seis años, creo que está pasándose contigo- me explicó-. Yo lo ayudé a secuestrarte- me reveló-, pero me doy cuenta de que no era la solución. No puedo ayudarte a escapar porque sería muy obvio, además de que Justin se pondría furioso y nos golpearía a ambas, quizá nos mataría.

-¿No le importaría que eres su hermana?- le pregunté extrañada.

-Ahora mismo está furioso y medio borracho, _____, ¿tú crees que le importaría?

-Noup.

-Te he traído crema aliviante y algo de comida, por lo que logré sacarle a mi hermano, no has comido desde ayer a la mañana.

-¿Cuánto tiempo he estado inconsciente?

-Seis horas y media, ahora son las dos de la mañana. ¿Puedes aplicarte tú la crema?

-Eso creo, lo intentaré, ¿me ayudas a abrir las piernas? Es que me duele mucho halla bajo.

-Claro- la chica tomó mis pies y los separó hasta que entre mis piernas hubo espacio suficiente para que yo metiera mi mano y luego me tendió el bote de crema.

-Gracias- le dije mientras metía un sólo dedo en la fresca crema-. ¿Podrías...?- le pregunté algo incómoda. Me daba mucha vergüenza que alguien me viera tocarme mi entrada.

-Oh, sí, seguro- me contestó y se dio la vuelta.

Metí la mano con crema entre mis labios vaginales, pasando el dedo sobre mi entrada, aliviando el dolor exterior, y luego metí el dedo lo más que pude en mi entrada para asegurarme de que la crema llegaba a todas partes. Suspiré de alivio.

-Ya está- le avisé a Kylie cuando retiré mi dedo de entre mis labios.

Ella volteó de nuevo hacia mí y me regaló una pequeña sonrisa.

-Ahora deberías comer- me dijo mientras tomaba un plato con carne y algo de ensalada. Me senté en la cama con las piernas cruzadas para poder comer sin ahogarme. Me tendió el plato, junto con un tenedor, un cuchillo y un vaso con agua.

-Gracias.

Cuando el aroma de la carne llegó a mis fosas nasales mi estómago gruñó, aunque también sentí náuseas. Eso era raro en mí, nunca había sentido náuseas ante un plato de comida, mi apetito siempre había sido impecable. Aún así tomé los cubiertos y el plato y los puse en mi regazo y el vaso volví a dejarlo sobre el aparador. Corté un pequeño trozo de carne y me lo llevé a la boca, pero un grito me hizo soltar el cubierto del susto.

-Oh, Dios mío, _____, ¡¿qué tienes en el cuello?!- ella me miraba fijamente. Fruncí el ceño, llevé mi mano hacia la zona mencionada y palpé suavemente. Hice una mueca de dolor al sentir los moratones en mi cuello. De repente recordé todo lo que había sucedido anoche y me sentí enferma.

-Justin me los hizo- expliqué los chupetones en mi cuello con voz amarga.

-Oh, lo siento mucho.

-No importa- volví a dirigir mi atención hacia la comida. Tomé nuevamente el tenedor con la carne y lo llevé a mi boca. Tenía hambre, pero, extrañamente, no era mucho. Mastiqué lentamente y tragué. Sentí como la carne triturada bajaba por mi garganta y luego por el esófago, para llegar al estómago. Éste se cerró y tuve que hacer un esfuerzo enorme para no vomitar.

¿Qué carajo me estaba pasando?