Is this a real goodbye? (Nash Grier y tu)

Capítulo 32: ''Corazones rotos''

Los dos días pasan rápido, y ahora nuevamente me encuentro en mi habitación en Louisiana.

Siento los gritos de mi madre en contra de Aaron el cual ha llegado a casa a altas horas de la noche, miro el reloj que se encuentra en la pared frente a mí y veo como este me da a saber que son las cuatro a.m.

Mi madre grita mientras mi hermano se dedica a ignorarla.

-¡Hueles a alcohol!-Se queja mi madre mientras detiene a mi hermano por el brazo justo frente a mi habitación.

Puedo ver toda la escena ya que la puerta de mi habitación se encuentra abierta, noto como la vista de mi hermano se posa en mí y frunzo mi ceño ¿Alcohol? ¿Qué has hecho Aaron? Veo su vista llena de lágrimas y una punzada de dolor me atraviesa ¿Qué ha sucedido aquí? Hace tan solo horas he llegado y ya me doy cuenta que este lugar ha sido un desastre los días que no he estado aquí.

Mi madre posa su vista en mí y luego en mi hermano, vuelve a soltar algunos regaños pero él no los toma en cuenta, finalmente ella se da por vencida y desaparece por el pasillo hacia su habitación, siento la vista de mi hermano quemando sobre mí y me encojo de hombros.

-¿Qué ha pasado?-Le pregunto luego de unos minutos de silencio.

Lo veo derramar las lágrimas que ha acumulado en sus ojos y él corre hacia mí.

-¡Aaron!-Grito con desesperación al verlo llorar.

-Tenías razón-Confiesa y siento mi sangre hervir- ella solo me utilizaba, jugaba conmigo-Solloza sobre mi hombro- la he visto _____________, me engaña a mis espaldas, la enfrente, y ella simplemente me dijo que no me amaba, que nunca lo había hecho-Aprieto mis puños y siento unas ganas inmensas de ir tras ella- me dijo que me había utilizado todo este tiempo, ¡Ella me utilizo!-Solloza.

Acaricio su espalda mientras intento tranquilizarlo, un sollozo adolorido es soltado de su parte sobre mi hombro mientras ambos tomamos asiento sobre mi cama y tan solo me limito a intentar consolarlo.

-Ella no vale la pena Aaron, ya encontraras a una chica que realmente te valore.

-Yo aún la amo-Susurra en medio de un sollozo y siento mi corazón estrujarse.

Acaricio su mejilla mientras seco sus lágrimas y vuelvo a decirle diversas palabras de consuelo.

A los pocos minutos él cae en un profundo sueño y yo siento mi corazón estrujarse al verlo así, siento como me entrar unas ganas inmensas de querer matar a la castaña y respiro rápidamente para intentar calmarme.

Acaricio el rostro triste de mi hermano y beso su frente antes de taparlo con las sabanas, me alejo de él mientras me acerco a mi armario para tomar mi pijama el cual me coloco luego de unos minutos.

Suelto un largo y pesado suspiro y me acomodo junto a él dentro de las sabanas de mi cama.

Las luces se apagan en el momento que choco mis manos y luego acomodo mi cabeza sobre el hombro de mi gemelo mientras lo rodeo con mis brazos, lo siento tan inocente tan frágil.

-Te quiero pequeño idiota-Susurro mientras acaricio su mejilla y beso nuevamente su frente.

Cierro mies ojos y caigo en un profundo sueño en tan solo minutos, si al llegar a casa me sentía agotada luego de esta pequeña escena me siento abatida.

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-Despierta-Susurro mientras muevo su cuerpo de un lado a otro.

-Uhm cinco minutos más-Me pide.

-Ya son más de las tres de la tarde-Le indico y él abre sus ojos.