Cap.12. Entre Polvo y olvido

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En aquel sitio, solo podía sentir un frío rodeado de oscuridad, aun así no había miedo en su interior, si no una fuerte curiosidad. Comenzando a adentrarse en aquel templo perdido, sus pasos eran lentos, ya qué algo le era extraño, era como si aquel lugar solo existiera en la oscuridad. Tocando los fríos muros de la entrada pensó.

—Esto es piedra pulida.

Su color iba del negro al gris, ademas algo le pareció extraño, ninguno de los muros interiores se veían rotos ni agrietados, todas las estructuras en las sombras no eran mas qué ruinas.

—Es muy diferente a cualquier cosa qué haya visto. ¿Quién hizo esto? ¿Conocía las sombras?

No percibía ningún peligro en el entorno. Pero aun así se volvió más precavido.

No era mucho lo qué podía ver, el interior estaba invadido de nubes oscuras, no podía ver a más de 2 metros, quería conocer aquel sitio a detalle

—Tendré qué acercarme a los muros si quiero ver más.

Dándose vuelta Dirigió su mirada a la entrada.

—O quizá deba regresar al otro lado.

Tanto movimiento lo había cansado un poco. por lo que dedujo que podría ser arriesgado.

—Debería conservar energía suficiente para poder volver.

Sin embargo su curiosidad fue mayor. Mientras intentaba salir de las sombras por un instante sintió una pesadez, Como la de un frío muro de piedras, siendo empujado hacia atrás, se mantuvo para no caer al suelo, iluminado con su linterna se llevó una gran sorpresa.

—¡Increíble!

Todas las paredes eran de una piedra rojiza, lisa y tallada, en las paredes había placas de piedra oscura, parecían hechas de piedra volcánica, cada placa media alrededor de 20 centímetros, y cada una tenía algo tallado, eran símbolos extraños. Esto cubría todas las paredes, por otra parte el suelo y el techo eran lisos, parecería ser un largo pasillo cuadrado, el lugar estaba algo polvoriento, Santi solo tenía una linterna para iluminar. pero lo poco que observaba era abrumador, en él despertó una gran curiosidad. No sabía qué decir, sentía que estaba en una gran aventura. descubriendo un pasado perdido.

—¿Qué es todo esto?

Se volteó observando la entrada, la cual estaba completamente cerrada, una pila de rocas obstruía la entrada.

—Parece qué hubo un derrumbe.

Mientras Santi examinaba con su linterna aquel montón de piedras noto un reflejo de luz.

—¿ah?

Rápidamente se acercó a revisar los escombros, retirando algunas piedras encontró aquello que reflejaba la luz, era metálico, más confundido comenzó a desenterrarlo llevándose una sorpresa

—¡Es una espada!

Finalmente con fuerza logró sacarla. A pesar de que seguramente llevaba un largo tiempo sepultada, el arma no parecía tener daño alguno, no tenía ningún rastro de óxido, parecía completamente nueva. Como si se hubiese colocado recientemente. Eso hizo qué pensara en will.

—¿Tenías planeado todo esto? ¿Pero, cómo?

Pero lo dudo fuertemente, debe ser casualidad. Aquella espada era pesada y difícil de cargar, además de qué le transmitía una extraña sensación.

—¿Debería llevarme esto?

Pero dudo, ya qué eso podía considerarse saqueo. También pasaron por su mente aquellas historias de terribles maldiciones a los saqueadores. Aun así veía el arma con cierta intriga.

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