•──•─•──•✦•──•─•──•
•──•─•──•✦•──•─•──•
Desde ese día Isaac y yo nos volvimos muy cercanos, hablábamos todos los días o la mayoría de ellos y cuando algún día faltaba a las clases siempre iba a su casa a asegurarme que estaba bien, algunas veces veía algún moretón en su cuerpo pero tampoco le presionaba para que hablase, sabía lo duro que era y lo mal que se siente que las personas que te miren con lástima.
Un mes exactamente era el tiempo que había pasado desde que volví a Beacon Hills, nunca había sido tan feliz en toda mi vida, aquí si tenía un hogar de verdad, con personas que quería y si me apreciaban de verdad.
— ¿Stiles estás bien? — Me apoyé sobre el marco de la puerta de su habitación mientras lo veía darle la vuelta a una pizarra que tenía, rodeé los ojos y esperé a que contestara.
— ¿Por qué iba a estar mal? — Responder con otra pregunta, típico de él, eso siempre se usa cuando no quieres responder.
— Tienes cara de llevar días sin dormir — Dije preocupada.
— Sky es solo que me cuesta dormir, no es para tanto — Quiso quitarle importancia y acabé asintiendo, él no me contaría nada así que tenía que descubrirlo por mi misma.
— Lo que tu digas — Dije antes de volver a mi habitación para coger el bolso y salir de casa en dirección al instituto, no iría con Stiles, me cabreaba que se cerrase, siempre nos lo contamos todo y que me mintiese, que se que lo está haciendo, me enfada, sobre todo porque se que no es una tontería, le está pasando factura.
En cuanto llegué al instituto me encontré con Scott y Alison, ambos parecían estar nerviosos por algo pero tampoco me quisieron contar nada, parecía que hoy todo el mundo había decidido ocultarme las cosas. Frustrada llegué hasta mi taquilla y saqué los libros de las clases que me tocaban y caminé hasta la clase, se fue llenando y los únicos asientos que faltaban por rellenar eran Scott, Stiles, Alison y Isaac.
Me excusé diciendo que tenía que irme por una llamada importante y en cuanto salí me puse a buscarlos, sabía que estaba pasando algo y si no me lo querían contar lo descubriría yo sola, los pasillos del instituto estaban vacíos, en los baños tampoco había nadie, estaba a punto de ir a buscarlos al campo de lacrosse cuando escuché unos golpes, venían de los vestuarios de chicos, me acerqué a la puerta y me quedé ahí esperando poder escuchar algo.
— Scott no puedes jugar el partido mañana o Derek te mata — Era la voz de Stiles, estaba segura.
— Alison estará ahí y por una vez en la vida soy titular en el equipo, podré controlarlo y Derek no se enterará — Y ese sin duda era Scott.
— ¿Te recuerdo que el padre de Alison es una cazador de hombres lobo Scott? ¿De verdad crees que es una buena idea? — Decía Stiles.
— ¿Sky? — Pegué un pequeño chillido al escuchar la voz de Isaac detrás de mí, me llevé la mano al pecho y suspiré tranquila.
— ¿Estás bien? — Me acerqué a él al notar que tenía bastantes ojeras y estaba algo pálido.
— No he pegado ojo — Respondió pasando las manos por la cara, parecía estar frustrado por algo, llevaba así un par de días.
— Sky — Stiles y Scott salieron del vestuario y se quedaron sin palabras al verme ahí parada, seguramente preguntándose si había escuchado algo de su conversación.
— ¿No sois un poco mayores para andar con historias de niños? ¿Hombres lobo? ¿Enserio Stiles? — Rodeé los ojos y los miré a ambos queriendo reírme.
— No son cuentos Sky — Dijo ahora Isaac y me giré a mirarlo sin creer que él estuviera diciendo eso, o yo estoy loca o lo están ellos.
— Exacto, son paranoias, son teorías conspiratorias — Dijo rápido Stiles, al final le creí, era lo más lógico, mi primo y su amigo nunca han estado muy bien de la cabeza, y por lo que veo Isaac tampoco.
— Olvidadlo, me voy a clase — Me di la vuelta y escuché un suspiro de mi primo, el idiota me las va a pagar, le pienso poner vinagre en la pizza esta noche.
— Espera — Isaac llegó a mi lado y caminó conmigo, llevaba las manos en los bolsillos y parecía pensativo.
— Mi padre estará todo el día fuera y no llega hasta tarde y he pensado que podías venir a casa y cenábamos juntos.. — Sonreí al escuchar su propuesta y asentí, él había cogido sus libros y se dirigía a clase pero lo último que yo quería era ir a aguantar a la insoportable profesora de literatura y juntando todo el valor que tenía hice algo que ni yo creía que era capaz.
Cogí a Isaac por la manga de la camisa y lo arrastré dentro del baño, no me había fijado en cuál habíamos entrado y me di cuenta que era el de hombre en cuanto entramos, entramos dentro de uno de ellos y cerré la puerta con el pestillo, Isaac me miraba con una chispa de adoración y diversión al mismo tiempo y lo apoyé sobre la puerta, me acerqué a él y pasé las manos por sus hombros para luego bajar una mano al cuello de su mano y agarrarla con fuerza para hacer que acerque su cara a la mía.
— ¿Sky? — Isaac era tímido y le estaba costando mantener la compostura ahora mismo pero también se le notaba que estaba excitado por esto, él me gustaba y creo que yo a él también y es una perdida de tiempo seguir esperando a que uno de los dos de el primer paso.
Sin esperar ni un segundo más junté nuestros labios en un lento pero necesitado beso, su boca era la séptima maravilla del mundo, o al menos era como yo lo sentía, Isaac pasó las manos por mi cintura y dejaba caricia por toda mi espalda, yo tenía mis manos enrolladas en su pelo y fui bajando por su abdomen hasta que él rubio rompió el beso haciendo una mueca de dolor, aparté la mano de su abdomen cuando noté la sangre y lo miré asustada.
— Dios mío Isaac — Intenté levantar su camisa pero me lo impidió, lo miré confusa y luego miré la sangre que tenía en mi mano.
— ¿Ha sido tu padre? — Pregunté con los nervios a flor de piel, esta situación me recordaba a mi pasado y pensar que el chico al que quiero está sufriendo lo mismo me partía el alma.
— Sky estoy bien, no ha sido él, fue un accidente, debía haber ido al médico, creo que está infectado — Isaac se tocó el abdomen por encima de la camisa y lo seguí mirando con la misma preocupación, este chico era demasiado testarudo, de nuevo intenté que me dejara ver y claro que me había vuelto a decir que no.
— Al menos ve a casa y trata de curarlo, te prometo que iré en cuanto acaben las clases, si no se cura ve al hospital — Dije acariciando su mejilla, él asintió y sonrió acercando su cara de nuevo a la mía, nos fundimos en un beso y salimos del baño, menos mal que todo el mundo estaba en clase.
ESTÁS LEYENDO
𝐀𝐍𝐆𝐄𝐋 (ISAAC LAHEY)
WerewolfSky estaba especialmente relacionada con el misterioso pero mágico pueblo de Beacon Hills. Stiles Stilinski era la única familia que le quedaba, se mudó de nuevo al tenebroso pueblo y todo cambió, cuando conoció a ese lobo, Isaac. El personaje princ...