El león y la serpiente- Primera Parte. TENTACIÓN

La carta

Draco y Hermione se quedaron ahí parados, Harry se había perdido tras el hueco de la entrada
de la sala común.

La chica estaba nerviosa no sabía cómo iba a enfrentar está situación. Pero llegado el momento tenía que hacerlo.

- vete, yo estaré bien, tengo que hacerlo sola. La chica lo miraba con desición.

El no quería dejarla sola, quería estar con ella para apoyarla. Pero sabía que ella no lo dejaría y que Potter lo echaría a patadas de ahí así que no le quedó más remedio que irse.

- si necesitas que golpeé a cara rajada  Potter avísame sí. Enviaré a Nui.

Ella le sonrió para tranquilizarlo, y se despidió de él con un pequeño beso en los labios. El le besó la frente antes de despedirse.
- Hasta luego gatita. Y le guiñó un ojo. Se dio la vuelta y salió de ahí.

A pesar de todo no se sentía tan mal como había imaginado que se sentiría si ellos se enteraban. Le había gustado ver la cara de asombro de Potter, al fin le había ganado en algo. Y ese algo era el cariño de su mejor amiga.
Pero aún así se preocupaba de lo que fuera a decirle el a Hermione. Y si la obligaba a dejarlo? No eso no iba a pasar, ella era muy inteligente y fuerte no dejaba que nadie la manipulara. 
Pero si el dejaba de hablarle por eso, eso si la iba a destruir internamente a ella. Eran muy buenos amigos desde primer año. Si el la dejaba de ver igual después de eso ella se desmoronaria.

Pero ahí estaba él para apoyarla, para sostenerla si ella caía.

Y con esa convicción se fue hacia la sala común de Slytherin.

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Hermione estaba aún parada frente al retrato de la señora gorda.
No se animaba a entrar.
Finalmente tomó aire se decidió.

"Sopa de leche" Susurró a la señora gorda que de inmediato la dejó entrar.

Harry estaba parado viendo la chimenea, al oír a la chica entrar no se volteó inmediatamente. Solo se limitó a seguir viendo el fuego.

La chica se quedó ahí parada viendo la espalda de su amigo.  Tenía los puños apretados.

- Por que? Fue lo único que dijo el chico.

Ella no respondió de inmediato.

Después de varios segundos pensando la mejor manera de decirlo habló.

- Harry, no tengo excusa, no voy a inventar cosas, y no voy a eximirme tampoco de mi responsabilidad...
Lo único que tengo que decirte es que lo... Lo  quiero...
La chica hablo firme pero aún así se le quebró la voz un poco.

Harry se volteó aún con los puños apretados.

- como sabes que no está jugando contigo Hermione? Cómo sabes que no te está utilizando para obtener información? Cómo estás segura de  que él siente lo mismo por ti?

La chica lo miraba y sus ojos se empañaron un poco.

- Sabes cómo me siento Hermione? Lo SABES?  El chico empezó a alzar la voz.

- Harry yo...

- creo que se cómo se sintió Sirius al  descubrir a colagusano....

La chica esta vez también alzó la voz.

- NO ES LO MISMO HARRY! ESCUCHAME! La chica estaba a punto de llorar, que la hubiese comparado con colagusano fue mucho. Peter Pettigrew era malo, había traicionado a los Potter por qué era un hombre malo y cobarde ella no era así.

- Me traicionaste Hermione, eso nunca, nunca me lo hubiese esperado de ti. Me siento decepcionado.

Pero el chico se sentía más que decepcionado, estaba dolido. Ella era su mejor amiga y él su peor enemigo.