El león y la serpiente- Primera Parte. TENTACIÓN

Quidditch y fiesta

Los dos chicos permanecieron así por mucho tiempo hablando de esto y el otroy callando por momentos. El la tenía aferrada a él. En un momento el sintió como ella se quedaba dormida en su regazo. Le acarició su suave y rebelde cabello y Le besó la frente.

- " No sé que voy a hacer sin ti" le susurró él en el oído.

Y así permaneció acunandola hasta que él también se quedó dormido. Sintiendo un poco de paz al tenerla a su lado por un momento.
Antes del amanecer, ella se despertó y se dio cuenta que se habían quedado así dormidos en la torre de astronomía.

Se removió en su lugar. El chico sintió como ella se movía y abrió sus ojos para encontrarse con los bellos ojos de ella.

- Buenos días bella durmiente. Ella le sonrió feliz.

El pensó que sería la última vez que vería esa bella sonrisa. Al menos dirigida para él.

- Buenos días le sonrió ella.

Él tenía una mano en el bolsillo, y sintió algo. Lo sacó rápidamente y vio que era la flor de jazmín. La olió por un momento y ella lo observaba embelesada. Él tomó las manos de la chica y se la dio.
Ella sonrió y la olió. Era el aroma del perfume que ella usaba.

Se levantaron y acomodaron bien sus túnicas.
Era incómodo dormir en esa situación, pero a ninguno de los dos le importó.

Antes de bajar él la aferro fuerte contra él y la besó, fue un beso apasionado, sin medir el tiempo, sin descanso. Para ella fue el beso más dulce y ansiado a la vez. Pero no tenía idea que para él era el último.

Cuando se despidieron en el séptimo piso. Ella aún le dirijo una dulce mirada.

- te veré luego Draco. Ella le besó una mejilla.
Luego caminó hasta su sala común.

- Adiós Hermione...
Susurró él viéndola alejarse. Un nudo en la garganta fue lo único que sintió.

********************************

Ella llegó hasta la sala común donde estaban ya algunos chicos levantados y vestidos con los colores de su casa para apoyarlos en el partido.
Subió directamente hasta su dormitorio y se entró a duchar y a cambiar. Puso con cuidado la flor que Draco le había obsequiado. Fue un bello gesto ya que él no era de cosas así. Pero había algo que ella había sentido muy raro, él le había dicho "Adiós Hermione" por qué? No lo sabia pero sintió que esas palabras le  pesaban al chico. Decidió no pensar más en ese asunto.

Cuando bajó Ginny la esperaba sentada junto a Harry.

- Ginny! La castaña se dirigió a ella sin mirar a su amigo.

Ginny se paró de su lugar y caminó hacia ella.

- Herms antes que nada, Él quiere hablar contigo pero primero escúchalo si... Me voy estaré en el gran comedor.

Ginny se fue dejándola ahí parada frente a su amigo.
El pelinegro solo la miró un poco contrariado.

- Hermione... Yo...
Ella se acercó a Harry y se sentó junto a él.

- Harry dime lo que quieras... Te escucho.
El le sonrió por primera vez desde hacía días.

- Hermione yo te respeto, respeto tu decisión, y lo que quieras para tu vida.

La chica sonrió.

- Harry gracias...

- Acepto tu decisión, Hermione más no la comparto. Eres mi mejor amiga, y comprende que es difícil para mi. Por muchas razones. No sé si él en realidad te quiere para algo bueno. No sé si es sincero. Pero como me dijo Ginny, eso es algo que debes de descubrir tu.