No me considero una persona interesante.
Si me conocieras de verdad, verías que no lo soy.
Disfruto estudiar y arreglar cosas. Me gusta escuchar música por horas, pensando en cosas al azar mientras lanzo y atrapo una pelota de tenis contra la pared de mi habitación, desde la cama. Pago cosas por internet. Veo películas raras, de esas que desconciertan a la gente y suelen tener menos de tres estrellas en Netflix.
No voy a fiestas y odio ir de compras, ya sea de comida o ropa. Cocino cosas simples, como fideos y arroz. Evito a los vecinos para no tener que saludarlos, y aunque adoro a mi familia, si estoy demasiado tiempo con ellos me siento asfixiado.
Hace una semana que pareces haber perdido el interés por mí. Creía que resultaba una persona más interesante a causa de nuestro juego, y mentiría si te dijera que no me sentía inseguro respecto a si te decepcionarías al concerme y ver que soy tan...
Básico.
Soy básico.
A pesar de eso, no tenía en cuenta la decepción que traería que dejaras de verme como alguien a quien querías conocer.
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Siempre todo y nunca nada
Teen FictionMis ojos te persiguen como si fuera un juego, pero ambos sabemos que no lo es.