Nuestro problema era que siempre teníamos todo para hacer que algo sucediera, pero terminábamos en nada por asumir sin preguntar, a causa de inseguridades y la malinterpretación.
Siempre todo y nunca nada por demasiado tiempo.
Hasta hoy.
Esta noche abrazaremos el todo y lanzaremos el nada por el balcón.
FIN
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Siempre todo y nunca nada
Teen FictionMis ojos te persiguen como si fuera un juego, pero ambos sabemos que no lo es.