❄️CAP. 12🔥

3.8K 357 94
                                    

-Yuna debe estar en el hospital un tiempo, no se encuentra bien.-

-¡Pero ella no esta enferma! Lo sabes, padre ¡Yuna esta bien!-

Los gritos del menor eran desesperados y enfadosos hacia su progenitor. No iba a soportarlo, estaban dejando sola a su hermana, la estaban aislando por algo que no era malo. Y si debía enfrentar a toda su familia para evitarlo, lo haría.

-¡Solo estas siendo igual de estúpido que todos en esta familia!-

El adulto lo miro por primera vez después de todo lo sucedido. Ikuto había dicho por primera vez una mala palabra en su presencia. Aunque el mayor no lo supiera, fue la primera vez que el muchacho decía una en sus nueve años de vida, pues jamás tuvo la necesidad de soltar alguna. Pero esta vez era diferente, estaba frente a una injusticia, donde todos en aquella familia eran cómplices.

De igual manera, también fue la primera vez que el menor sintió su mejilla arder por el impacto de una mano contra esta. En ese mismo momento entro Hiromi, quedándose helada ante tal escena. Ellos jamás levantaban una sola mano hacia sus hijos.

-Solo eres un niño, Ikuto. No entiendes nada.-

A él no le importaba entender. Solo veía que su pequeña hermana estaba siendo juzgada de manera incorrecta.

-Los detesto.- Escupió con recelo, mirando primero a su padre y luego a su madre.

Sin decir más, el menor salió corriendo de la oficina de su padre, ignorando los llamados de su madre.

Sin decir más, el menor salió corriendo de la oficina de su padre, ignorando los llamados de su madre

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-¡Ikuto-nii!-

Una pequeña peli-azul bajo cuidadosamente de la alta cama de hospital al ver a su hermano mayor entrar al cuarto. Ikuto miro el pequeño cuarto, haciendo una mueca por lo gris y apagado que se veía. El cabello de Yuna llamaba demasiado la atención entre todas aquellas paredes y muebles blancos, sin contar sus grandes y deslumbrantes ojos dorados. A veces, Ikuto pensaba que los ojos de su hermanita eran capaces de brillar en la oscuridad.

-Yunnie.- La llamo con una sonrisa el mayor, abrasándola con fuerza. Demasiada tal vez.

-I-Ikuto-nii n-no respiro.-Habló con voz pequeña y entrecortada.

El niño la soltó rápidamente, tomándola por los hombros y examinándola con preocupación. Yuna le devolvió una sonrisa de brillantes dientes de leche y una diminuta abertura en donde faltaba uno.

-Lo siento, Yunnie ¿Estas bien?- Cuestionó sin dejar de examinarla. Ella asintió. -¿Realmente estas bien? ¿No te tratan feo aquí?- Miró a todos lados algo desconfiado.

-Nup, las personas son muy bonitas, pero...- La menor hizo un pequeño puchero a la vez que fruncía el ceño.

-¿Pero...?- Esperó la respuesta, entre impaciente y preocupado ¿Alguien la había lastimado?

Luz y Oscuridad [Todoroki Shouto - BNHA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora