~Citas Inesperadas.
Capitulo 28.
Justin se movió incomodo en su cama, escuchando unos ruidos provenientes del ventanal, que se encontraba en su habitación. Intento dormir otra vez, pero los ruidos eran insistentes. Cansado y somnoliento, levanto su cabeza para observar la hora en el reloj colgado en la pared, que marcaba las 3:15 de la mañana, acomodo su cabeza en la almohada, volviendo a quedarse dormido, hasta que se levanto bruscamente, pensando lo peor. Giro su cabeza, a la cama de Miley, y no estaba.
-Ay no… ¡Mierda!- salió de la cama en un salto, mientras la preocupación llegaba a su cuerpo. ¿Si a Miley le pasaba algo, que iba a hacer? Jamás se lo perdonaría. Volteo a todos lados, a punto de exclamar su nombre, hasta que un chillido lo interrumpió…provenía del ventanal, que se encontraba cerca de la puerta. Justin camino despacio, para no hacer tanto ruido. Sus músculos se relajaron al instante en el que vieron, a la pequeña figura de Miley, en frente de ese gran ventanal, estaba sentada en una silla, apoyando su barbilla en una rodilla que abrazaba. El corazón de Justin se estremeció de una manera fuerte, cuando vio una lágrima caer por su mejilla. Sintió una punzada en el estomago. Como odiaba ver llorar a su castaña llorar, lo odiaba de sobremanera. Se acerco a ella sigilosamente, sin que se diera cuenta, se puso justo atrás de ella, mientras ella seguía observando perdidamente la luna.
-Si sigues llorando, harás que la luna llore también- susurró en su oído frotando sus brazos cariñosamente, mientras esta daba un salto espetándose.
-Justin…- subió sus manos rápidamente para quitarse las lágrimas- ¿Te he despertado? Si es así, discúlpame, no fue…
-No Miley, no pidas disculpas por favor- se inclino en frente de ella, tomando fuerte sus manos- Te dije que estaría para ti, cuando quisieras. ¿Son esas pesadillas?
-Es mucho peor que eso Justin- dijo seca Miley dirigiendo nuevamente su vista otra vez a la luna, mientras otra lagrima se escapaba de su ojo.
-Dime, lo solucionaremos.
-No creo que se pueda hacer nada, estoy segura que lo hará…
-Miley...-le suplico Justin con los ojos, mientras tomaba su barbilla para que lo viera.
-Justin- dijo la castaña viéndolo con miedo en sus ojos, las lágrimas se acumularon- Jared me quiere matar…
La cara y los músculos de Justin se endurecieron, apretó su mandíbula.
-¿Te hizo algo mientras yo no estaba?
-No, no. Fui a conocer a las chicas, y descubrí muchas, créeme, después me fui a mi cuarto, pero en el camino, escuche unas risas cerca de un pasillo. Me acerque, para ver quién era, y detrás de una puerta, la cual supongo es la habitación de Jared…- pauso, mientras recordaba todo lo que había sucedido- Escuche una conversación, que parecía por un teléfono. Justin, él le decía a una persona, que en pocos días me iba matar.
Justin apretó sus puños, impulsivamente.
-¿Estás segura que escuchaste eso?
-“Miley Cyrus estará muerta después” eso fue claramente lo que escuche Justin. El me va a matar.
Justin miro la cara horrorizada de Miley, que no dejaba de derramar lágrimas. No dudo ni un segundo y la abrazo.
-Escúchame bien Miley, mientras yo esté vivo, mientras yo esté aquí contigo no te pasara nada. Te juro que ese hijo de puta no te tocara ni un solo pelo, ¿Me escuchaste?- hablo firme Justin, la ira pasaba por sus venas. Miley seguía llorando, pero de cierta manera, la protección que tanto necesitaba llegaba- No pasara nada, te lo prometo.
-Justin, es que no, no lo entiendes. No me preocupo por mí…
-¿Entonces?
-Si ya no estoy, contigo…- lo miro, dudando si decirle o no- Si ya no estoy, contigo, si me voy, si me muero… ¿Cómo se que en el lugar a donde voy, habrá una persona que me hará sentir la misma seguridad que cuando estas tu conmigo? ¿Cómo se que tu estarás bien, Justin?
Justin la miro con los bien abiertos, su boca había quedado boquiabierta. La miro por unos segundos, sin poder creerlo. Se detuvo con detenimiento a ver sus ojos, que se encontraban llorosos y rojos.
#FLASHBACK
-¿Cómo se supone que lo sabré, abuelo?- resoplo Justin.
-Oh hijo, créeme, cuando ella aparezca, tu sabrás que ella es la indicada.
-¿Tu como supiste?.
-Simplemente la vi a los ojos, y me di cuenta.
-¿De qué?
-Que tu abuela estaba hecha para mi, y yo para ella. Ella era ahora la razón de mi vida.
-¿Solo te diste cuenta cuando la viste?
-No es solo que la veas Justin…- lo miro mal su abuelo- Hay algo, que vez en ella, algo que jamás, jamás viste en tu vida. Algo que te pide a gritos, que no la dejes escapar, algo que te dice, que por fin ha llegado.
-Abuelo, perdón que te diga esto, pero, no creo que con solo ver a una chica puedas saber que es el amor de tu vida.
-Oh Justin- negó con la cabeza su abuelo- Aun eres un chico, para entender estas cosas. Cuando madures, te darás cuenta.
-¿Y si no siento nada cuando la vea?- pregunto curioso.
-Lo sentirás- sonrió- Y lo sentirás justo aquí- señalo su pecho, en la parte donde se encontraba su corazón. Justin le sonrió a su abuelo.
Y como hubiera sido ayer, Justin recordó esa conversación de invierno que tuvo con su abuelo, cuando el apenas tenía 16 años.
“Lo sabrás cuando la veas a los ojos. Ahí sabrás, que nació para ti, y tú para ella. No la tienes que dejar ir, pase lo pase” resonó la voz de su abuelo en su cabeza, mientras sentía que el corazón se le salía, y su estomago se disparaba con polillas. Miley también lo veía, nadie decía nada, como si ambos se estuvieran dando cuenta de tantas cosas, con solo verse a los ojos. Una alegría enorme invadió el cuerpo de Justin. Por fin, por fin había encontrado a su chica, había encontrado a el famoso…amor de su vida.