~Citas Inesperadas.
Capítulo 5.
-Mierda- dijo Justin, tapándose la cara, con sus manos temblorosas.
Le había gritado de una manera tan cruel, solo para saber la razón por la cual Selena le había hecho eso, sin importarle si eso había sido verdad o mentira. Había caído en las mentiras de Jared al igual que la prensa. Le había criticado sin conocerla. Ahora se sentía peor de lo que se sentía antes, al recordar lo de Selena. De tan solo imaginar por lo que tuvo que pasar y por lo que paso hace cinco minutos gracias a él, le daba ganas de golpearse así mismo, había sido un completo estúpido al gritarle de esa manera viéndola como una fácil. Grito con desesperación, tirando y rompiendo cosas del cuarto, mientras imaginaba como ese infeliz le había lastimado. Era claro que Justin no creería a un simple video donde Jared salía lloriqueando; recordó las palabras que él le contó la noche que se vieron en aquel bar para dejar sus penas atrás, sentía que con él podía tener confianza ya que después de todo Miley le “había sido infiel” al igual que Selena con él, o eso fue lo que creyó. “La encontré con mi mejor amigo en su auto. Fue horrible Justin, jamás me había imaginado que Miley me podía hacer eso. Ella era solo una perra y yo caí en sus juegos. Lamento mucho que hallas pasado por lo mismo amigo”
-Oh Miley- susurro triste-¿Pero qué he hecho?
Le había visto la cara de tarado al convencerlo que la víctima había sido él, pero ahora que ya sabía la verdad, eso no se quedaría así. No iba a ser por haberle mentido, fingiendo que tenía el mismo dolor que él, si no por haberle hecho eso a Miley. Salió hecho una furia con los puños apretados, directo a buscar al infeliz de Jared.
Subió a su auto y deslizo la pantalla de su celular para checar el mensaje que el desgraciado le había enviado:
“¡Justin! ¡Hermano! Quería saber cuándo nos podríamos ver. Hace mucho que no hablamos. ¡Espero verte pronto!”
-Y pronto desearas no a verme visto desgraciado- susurro Justin, rojo por la furia mientras enviaba un mensaje preguntando si estaba en su casa y este, a los poco segundos contesto con “si”, Justin sin pensarlo dos veces piso el acelerador, la rabia le salía hasta por los poros. Jamás se había sentido con tantas ganas de meterle una paliza a alguien, y ya no le iba a importar nada, ni siquiera si lo metían a la cárcel o cuantos puñetazos le metería a Jared, lo único que le importaba era Miley, ¿Cómo iba a perdonarlo después de lo que le hizo pasar? Ni el mismo se iba a perdonar.
Cada vez que recordaba las lágrimas de Miley pisaba el acelerador con más fuerza, apretaba el volante y rechinaban sus dientes. En menos de lo que tenía pensado ya estaba a las afueras de la gran mansión de Jared Davidson, bajo de su auto y toco la puerta desesperadamente, y a los pocos minutos Jared abrió.
-Justin, no te...-lo interrumpió alzándolo de la camisa fuertemente.
-¿Tan poco hombre fuiste para hacerle eso a Miley?- le grito Justin azotándolo contra una repisa.
-¿Qué? ¿Pero de que me hablas Justin? Cálmate.
-No, no me calmo Jared. Eres un desgraciado, gracias a ti culpe a Miley de algo que no hizo.
-Ella me engaño, Justin.
-Deja de mentir infeliz, abusaste de ella- lanzo el primer golpe justo al estomago, Jared cayo- Anda dime otra vez que te engaño. Hombres como tú no merecen vivir.
Jared hecho una carcajada al aire, a lo que Justin frunció el ceño. ¿Pero qué diablos pasaba?
-¡Sí! Yo la viole, Justin- tosió-¿Que me piensas hacer, eh? ¿Me piensas matar acaso?- tomo rápido del cuello a Justin- anda mátame, pero si lo haces, todos te culparan y no habrás logrado nada, porque Miley seguirá siendo la puta que engaño al guapísimo y encantador de Jared Davidson. Recuerdo como lloraba y como se quejaba-río- "¡Jared por favor no lo hagas! ¡Jared!" oh, pobre, pobre Miley... ¿Y sabes que es lo mejor de todo Justin? Que tú me creíste, como los demás- lo soltó y este respiro llenando de aire sus pulmones.
-Eres un enfermo Jared- dijo en un hilo de voz Justin.
-Que pasa amor- se escucho el hilo de una voz, de una mujer acercándose, pero Justin reconoció esa voz al instante.
-Oh querida, quiero que saludes a nuestro amigo que nos hizo una visita inesperada-
Justin volteo y la vio ahí, con la boca entre abierta e inmóvil.
-Selena- susurró él, adolorido.
-Jared que... ¿Qué hace el aquí? ¿Que está pasando?- preguntó Selena nerviosa este la ignoro y se agacho al nivel en el que estaba Justin.
-Si Justin, yo era al que encontraste en la cama con Selena aquella noche, yo fui su amante, tu y Miley son tan estúpidos que tardaron mucho para enterarse. No importa que hagas Bieber, fáciles o no fáciles las mujeres, seguirán amándome. Porque tengo esto- toco su cabeza, localizando su cerebro- Utiliza el tuyo y disfruta la vida, a mí nadie me deja. Tuve que darle una lección a esa perra.
