Capítulo-3.

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Estoy hambrienta, comienzo a escuchar unos pasos y entonces...

La puerta se abre, dejando ver a una madre muy confundida, de inmediato me levanto y le doy un abrazo, lo cual la confunde mas, tiene una cesta de ropa en sus manos y entonces habla.

-Pensé que estabas en tú habitación. -Me dice con un tono de confusión, meneo la cabeza en negación y le sonrío alejándome de ese lugar.

Me dirijo rápidamente a la cocina, en busca de comida, tengo tanta hambre que podría comerme un cerdo completo, creo que estoy exagerando un poco.

Me acerco a la nevera, lo primero que veo es una pizza congelada, un zumo de naranja, manzanas y solo de ver se me hace agua la boca. Tomo la pizza, sin importarme si es para la cena, abro el microondas, luego introduzco la pizza congelada y presiono el botón para 2 minutos, me estiro para tomar un vaso limpio y tomar un poco de jugo.

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Son las 7:00 pm, me encuentro alistando mi mochila para la escuela, así es, mañana comienza la tortura, pero por lo menos podré ver a mis amigos, ya que en todas las vacaciones no pude verlos, porque estaban de viaje o simplemente visitaban a sus familiares lejanos, (excepto a Katherine, ella estuvo prácticamente como un chicle en mi zapato).

No crean que me olvidé de lo que Kate y Axel me hicieron, estoy pensando en una venganza digna para esta situación, fue muy cruel de su parte, no dejarme comida y que Axel le mintiera a mamá para que no me busque.

Al terminar de entrar mis cuadernos en mi mochila, la cierro y la pongo al lado de mi cama. Me dirijo a mi baño para darme una ducha, me quito la ropa y entro a la bañera, abro el grifo del agua, se siente muy bien el agua fría correr por mi cuerpo, podría quedarme así por horas.

Salgo envuelta en mi toalla, me dirijo a mi armario para buscar una pijama y escucho la voz de mi madre.

-¡ALICIA, LA CENA ESTÁ LISTA! -Grita desde el pasillo, no sé por qué grita, se puede acercar y tocar la puerta y decírmelo suavemente, pero así no es mi mamá.

-¡BAJO EN UNOS MINUTOS! -Le repondo de la misma forma.

Abro un cajón de mi armario, encontrándome con una pijama que no uso hace 3 años, me la regaló mi abuela por mi cumpleaños, consiste en una blusa de panda, con un short con pequeñas caritas de panda y un gorro con orejas de panda, es muy adorable, sin pensarlo me coloco el short, la blusa y por ultimo el gorro.

Estoy frente al espejo, me veo como una niña de 12 años, pero solo es para dormir, me pongo mis pantuflas y me dirijo a la puerta, al estar en el pasillo, comienzo a recordar todo lo que comí al salir del cuarto de lavado. No tengo hambre, mi madre es del tipo de persona que le gusta ver que aprecien su comida, o se pone sentimental y piensa que lo que hace no es suficiente.

Me encuentro bajando las escaleras, con el estómago a reventar, no creo poder comer algo.

AXEL POV.

Estoy muy nervioso, no saben de qué es capaz Alicia cuando se venga, creo que me pasé un poco, dejarla sin comida y engañar a mamá no fue una de las mejores cosas que he hecho.

Me encuentro sentado en el comedor, mientras veo cómo mamá organiza la cena sobre la mesa, ella llamó a Alicia hace 5 minutos y aún no baja, eso me da tiempo de pensar qué es lo que planea, escucho unos pasos provenientes de la escalera, trago saliva.

Es el final de este chico tan sexy, espero que mamá nunca me olvide. Lo sé soy un poco dramático.

Al verla no puedo evitar sonreír, se ve muy tierna, con esas orejas de panda en su cabeza, se acerca y se sienta a dos sillas de mí, estoy algo confundido, pensé que entraría con un bate y me pegaría hasta quedar inconsciente.

Detras De Los Lentes De Sol... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora