Octavia
Miro su mano, donde esta mi short. Muerdo mi labio unos segundos. El me lo tiende con ambas cejas levantadas y luego se acerca. Suspiro mirandolo.
Se planta frente mio y tomo lentamente el short entre sus manos.
Deberia decir algo.
Dios, deberia renunciar. Esto no es correcto. En el camino a Australia, me asegurare de hacerlo. Se que la paga es demasiado buena, pero no puedo manejar este tipo de cosas.
Carraspeo y bajo mi mirada. Me coloco el short aun sentada y luego me levanto de la cama, rozando levemente su cuerpo.
— Ire por un cafe.— Murmuro y paso por su lado
— Octavia.— Cierro los ojos ante su tono de voz— No puedes ignorar lo que paso anoche.
Abro los ojos y miro el suelo unos segundos, me giro hacia el.
— En realidad, esperaba que asi sea.— Frunce el ceño— Lo que paso estuvo mal y tu lo sabes.
— No.— Dice rápidamente — No estuvo mal para mi.— Se acerca a mi
— Eres mi jefe, la unica relacion que debe haber entre nosotros es laboral.— Trato de mantener firme pero me cuesta, su cercania me afecta mas que antes
— Es un poco tarde para eso.— Parpadeo. Baja lentamente su cabeza, rozando su nariz con mi mejilla. Cierro los ojos— No te resistas.— Susurra y lleva sus manos a mi cintura. Sus labios llegan a mi cuello pero me separo retrocediendo
Tengo que parar antes de que pierda la nocion.
— No.
Lo unico que quiere es tener ese tipo de relación, utilizarme cuando quiera hasta que se aburra. No puedo permitir eso.
— Octavia..
— No se me acercara mas. Y quiero volver.— Me mira confundido— Y cuando lo hagamos tendra que conseguirse otra secretaria, porque ya no trabajare para usted.— Sus ojos se abren mas de lo normal— No soy de las que soportan que las utilicen. Esto ya llego a un limite.
— No te estoy utilizando.— Dice lentamente y con la mirada seria
Me encojo de hombros.
— No te creo y no me interesa. Claramente empezar a trabajar en esa empresa fue un error.
Entrecierra los ojos y avanza un par de pasos.
— ¿Un error?, ¿lo dices por mi o por ti?— Frunzo el ceño
¿Ahora de que habla?
— Algo me dice que ibas a dejar en mi empresa de todos modos.— Baja su cabeza — Tal vez, porque no eres en verdad una secretaria.
Mi respiracion se atasca y mi corazon empieza a palpitar mas rapido.
— No se de que hablas.
— Nunca te recibiste de secretariado ejecutivo.— Abro mi boca
¿Como demonios sabe eso?
— Ocultas muchas cosas, Octavia.— Murmura — Nunca fuiste secretaria de nada, quien sabe como habras hecho para convencer a Carla de aceptarte. O de donde aprendiste las cosas basicas. Y lo ultimo, tu caracter.
Trago saliva y aprieto mis puños.
— Ese golpe que diste ayer no fue uno cualquiera, y lo veo. Veo en ti algo mas alla que alguien correcta, tranquila y timida.— Frunzo mis labios — Esta pregunta te la preguntare solo una vez, ¿quien eres, Octavia?
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Mi Alfa
عاطفيةHermes Stärke, dueño de la Empresa Petrolera Stärke. Concentrado plenamente en mantenerla en pie y otros problemas personales, por ejemplo, cazadores. Quienes aparecieron ya hace varios años atras. Pero aun asi, Hermes parecia tenerlo todo controlad...