twenty six

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Narra Joaquín.

Por fin llegó el momento que tanto esperaba. La dichosa comida en la que mi mamá conocerá a Diego. Bueno, ya casi.
La comida está programada para las 3 de la tarde, apenas son la 1 y tantas. Lo que quiere decir que tengo menos de dos horas para arreglarme.

Busqué entre mi ropa algo especial, algo que quizá nunca me haya puesto estando con Diego y ¡boom! encontré un crop top rosa que jamás me he puesto públicamente por miedo al típico qué dirán, combinándolo con unos jeans negros al igual que los tenis.
Me metí a bañar, me vestí, me peiné, me perfumé etc etc y ya eran las 2:30. Joder, el tiempo se me fue volando.

Me miré al espejo y obviamente me encantó lo que ví. Hoy me siento hermoso. Espero gustarle a Diego más.

Bajé rápidamente a la cocina para ver como iba mi mamá con la comida. Le faltaba poco, así que le dije que yo terminaría de checar para que ella pudiera ir a arreglarse.

Al cabo de unos 20 minutos ella bajó, viéndose bonita como siempre, la comida ya estaba terminada, así que ella empezó a acomodar los platos en la mesa, mientras que yo tomé mi teléfono para checarlo después de aproximadamente 3 hrs.

En cuanto a Elaine y Niko, sólo vendrá Niko. Ambos me comentaron que habían terminado, mientras que Elaine se disculpó por no poder asistir, ya que saldría de viaje para distraerse de todo.

Tenía varios mensajes de Diego, preguntándome como debería venir vestido, sin embargo, estos eran de hace 2 horas, siendo de los más recientes un "¿Bonito todo bien?" "Creo que llegaré antes, me preocupa que no contestes" "Ok, definitivamente iré para allá" enviados a las 2:40. Dios, no demora ni 5 minutos en llegar.

- Mamáaaaaa - grité mientras caminaba en su dirección - ya casi va a llegar... - y así, el timbre de mi casa me interrumpió mi oración - Diego.

- Bueno, iré a abrir la puerta - dijo mi mamá, llendo yo detrás de ella.

Al abrir la puerta, ahí se encontraba la persona más hermosa del jodido planeta tierra, como siempre, con esa sonrisa tan perfecta que lo caracteriza, sosteniendo una caja de galletas y una gerbera rosa (imagen en multimedia).

- Hola señora, buenas tardes ¿me da permiso de pasar? - preguntó.

- Claro, adelante hijo - comentó mi mamá cediendo el paso para después cerrar la puerta.

- He traído estás galletas para usted - dijo mientras se las entregaba, para después ponerse enfrente de mí - y ésta flor es para tí Joaco, espero que te guste.

- Por Dios ¿qué si me gustó? me encantó Diego, es un hermoso detalle - contesté dándole un abrazo.

- Me alegra que te haya gustado - comentó con una sonrisa.

- Bueno, muchas gracias por las galletas Diego, ¿por qué no se van a sentar en lo que llegan los demás? - habló mi mamá.

- Oh, ma, se me había olvidado decirte. Emilio no va a venir, al igual que Elaine, así que el único que falta de llegar es Niko - dije mientras mi mamá se dirigía de nuevo a la cocina.

- Oye Joaco - habló Diego, una vez sentados en el sofá - hoy te vez más bonito que siempre - siguió mientras acariciaba con su pulgar mi mejilla - definitivamente los crop tops y el color rosa hacen resaltar tu belleza.

- Ya güerito, tampoco exageres - dije sonrojado hasta las ojeras.

- No exagero, te vez precioso mi niño - ¿escucharon eso? fue mi corazón teniendo una taquicardia a causa de tanta ternura que me produce Diego.

♔Ƭυ αмιgσ; мι cяυѕн♔ ᴰᶤᵃᶜᵒ/ ᵛᵃˡᵈᵒᶰᶤDonde viven las historias. Descúbrelo ahora