thirty

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Narra Joaquín.

Me encontraba plácidamente durmiendo cuando Renata brincó bruscamente en mi cama. Joder ¡que alguien la pare! se encontraba gritando cosas como "Joaquín, ¡arriba carajo!" "No seas flojo, ya son las 11 am" "Necesito tu ayuda" "Ven, levántate" etc, en realidad, mi único propósito era seguir durmiendo, así que me tapé la cabeza con mi almohada. Si quiere mi ayuda, que se espere hasta que yo me levante, he dicho.

- Joaquín, ya levántate, necesito tu ayuda para comprarme ropa.

Sólo eso bastó para qué mi cuerpo estuviera sentado en la cama, atento a las palabras de Renata.

- Desde ahí hubieras empezado, te escucho - respondí.

- Necesito que te bañes, para después desayunar y salir de compras, si se puede todo el dia o bueno, hasta como por las 5 de la tarde, así que ¿jalas o te da frío? - comentó.

- Jalo Ren, ahorita te alcanzó para comer, adiós - dije mientras la sacaba de mi cuarto.

Busqué entre mi ropa algo para ponerme y agarré lo primero que ví, igual, a mí todo se me ve bien; bueno, eso dicen.

Para cuando termine de bañarme y arreglarme ya eran las 12 del día.

- Joaco, te pasas en serio, una hora entera para bañarte y ponerte ropa - habló Renata cuando me vió entrar a la cocina.

- Renata, te pasas en serio, un año entero y aún no superas a tu ex - contesté también, ganándome miradas de odio por su parte y risas de mi mamá.

Así se pasó el tiempo del desayuno, entre bromas y una que otra verdad, para llegar a la 1 PM al centro comercial.

- ¿Y qué buscas precisamente Ren? - pregunté una vez que ya estuvimos enfrente de las tiendas de ropa.

- No sé, un vestido, pantalón, blusas, quizá uno de cada uno - respondió entrando a un comercio.

Inmediatamente entro buscando los vestidos, agarró como diez y se quiso probar ¡TODOS! Tardó más de una hora probándolos y obvio, tomando fotos para ver qué tal le quedaban; lo peor fue que no se decidió por ninguno y agarró otros 10 más. Si seguía así, no saldríamos a las 5, si no a las 10 de la noche.

Eran aproximadamente las 3 de la tarde cuando por fin decidió que vestido comprar. ¡Gracias a Dios, Jesús y el espíritu santo!

- Muy bien, ya es hora de irnos - dije jalando su brazo en dirección a la salida.

- ¡Alto ahí jovencito! - contestó tirando de mí hacia atrás - aún falta comprar algo.

¿Qué? pensé que era broma eso de que quería una cosa de cada prenda.

- Es algo para tí - comentó al ver mi cara de sufrimiento.

- ¡Wow! ¿es neta? ¿neta me lo juras? - respondí sonriendo.

- Obvio, así que vamos, elige algo, yo lo compro - habló haciendo que me impactara más ¿por qué rayos me está comprando ropa?.

- Pero ¿por qué? no es mi cumpleaños, no veo el porqué a un regalo.

- No preguntes, ¡sólo gózalo! - y con esto dicho, me dirigí OBVIAMENTE a la zona de crop tops; uno nuevo no me vendría mal.

Pase aproximadamente una hora eligiendo uno y al final, uno azul llamó mi atención, era lindo y tenía un pequeño oso polar (como el de We Bare Bears) en el centro.
Cuando estaba pagando, Renata realizó una llamada y sin querer escuché que le decía a alguien que ya "vamos" para allá. Lo dejé pasar, en realidad no le tomé mucha importancia, quizá fue mamá. Salimos de ahí pasadas de las 4:30.

♔Ƭυ αмιgσ; мι cяυѕн♔ ᴰᶤᵃᶜᵒ/ ᵛᵃˡᵈᵒᶰᶤDonde viven las historias. Descúbrelo ahora