Ligando!

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Ligando en el Facebook!
Estás, un día cualquiera, en tu horario laboral, haciendo tus cosas y de pronto te avisa el móvil de un mensaje entrante…
Estás en el trabajo, si. Pero jo! Y si es importante? Ah! que es el Messenger y que lo importante no te lo avisan por ahí. Venga, que es de mala educación no contestar…
Así que ahí dejo todo, en aras de demostrar la buena educación que mis padres me han dado y miro el mensaje.
Recuerdan eso de que no tengo Amo, no? Así que cualquier mensaje que denote la mínima posibilidad de encontrar un candidato, ya conlleva que el mensaje pase de… sólo es el Messenger a… UN MENSAJE!!! Y ya como niña pequeña abriendo un regalo le das a la burbuja del chat.
Oh! Qué bonito! Si es que el Dom me ha escrito un mensaje de ensueño… no miréis las faltas de ortografía, jolines, no me seáis tiquismiquis. Que no a todos nos funciona el corrector o sabemos cómo usarlo. Ya os vale! No saco nada bueno de vosotros…
Así que luego de hacer un trabajo profundo de traducción de ESO QUE HA ESCRITO al español, entendí que quería hablar. Si, con H. Pero ojo, que me ha dicho Señorita! Me ha tratado de Ud. y todo! Qué bello momento! Qué emoción!
Con lo cual miré la hora, y dado que mis jefes se niegan rotundamente a dejarme ligar en horarios laborales (algo que no llego a comprender, pues saben lo feliz que estaría si ligara? Alguno pensó en cómo subiría la producción? Como aligeraría los oídos de mis compañeros, pues serían otros lo que deberían escucharme?  Pero nada chicos, que no hay manera de negociarlo en el trabajo, en fin, esa manía de querer que en el trabajo sólo se trabaje…) le escribí un mensaje escueto diciendo, buenos días, en estos momentos no puedo conversar, me encuentro en el trabajo. Si le parece bien, quedamos por la tarde?
A lo que respondió, cuando ud quiera señorita!.
Y así, sin más, ya tenía una cita en el Messenger!
Qué nervios! Cuánta expectativa!  No había tenido tiempo ni a ver su perfil. Y como pasa siempre, basta que quieras saber o ver algo, para que todo Dios te traiga trabajo. Así que tuve que resignarme, dejar a un lado mi impaciencia y rogar por que las horas que me quedaban por delante, pasaran pronto. Y no pasaron pronto!!!
Pero bueno, finalmente llegué a casa, preparé mi café y me senté cómodamente en el sofá, mientras ya iba abriendo el móvil.
Envías la típica pregunta de Buenas tardes, cómo estás? Esperando romper el hielo y proseguir con la conversación. Y si! Estaba en línea!
Y ahí ya dejamos protocolos a un lado y nos adentramos en esa vorágine de intercambio de palabras donde buscas como meta el conocer a la otra persona.
Vale, venga, yo hablaba y el pobre hombre murmuraba algo cada tanto… y sí, por el Messenger también se murmura. Para reconocerlo, a los menos entendidos, es cuando comienzan con los monosílabo y el… está escribiendo cinco minutos y luego sólo aparece un OK… ahí ya sabes que sus neuronas están a punto de entrar en cortocircuito.
Así que decidí reducir la marcha y ver si hablaba él… y sí! Habló! Y dijo…
Me estoy haciendo una mazmorra y pienso secuestrarte…
Jajajajajaj así sin más. Después de cinco minutos de charla, me suelta eso…
Yo dije, vale. Si tú lo dices… y me contesta: es que yo tengo una mente muyyy perversa.
Y ahí dije, mierda! Otro más!
Y no, no es que yo sea aguafiestas, pero ya los ves venir. Y como dice el refrán, dime de que alardeas y te diré de qué careces…
Así que frustrada, sobre todo conmigo misma, le digo… y a qué te refieres con una mente muy perversa? A que te quiero secuestrar, no has oído?. Sí, cariño, lo he oído. (Ya obvio el trato de señor y demás, lo siento, pero llegados a este punto… mejor os dejo que vosotros lo juzguéis)  Y mi pregunta es… vale, me secuestras, me llevas a tu mazmorra en obra y luego qué?  No sé, jugamos?
Llevo los lego? Jolines!
Pero en un último intento de rescatar algo de la conversación y no ser mala o prejuiciosa le pregunto… Y tú eres de cruces, marcos o postes?.
Cri, cri, cri…
Sip, así se quedó el Messenger. Hizo cortocircuito y se quedó en silencio absoluto.
Y a los pocos minutos me responde, yo no uso esas cosas.
Ufff, vale, respira, tranquila. Y vuelta a preguntar, entonces qué usas? Qué te gusta?
La idea de secuestrarte, llevarte a mi cabaña y follarte delante del fuego.
A ver, no es que sea rancia. Lo siento si sueno así, pero… Y a qué parte de todo esos le aplicas el BDSM?  Dónde quedan las órdenes, los azotes, las pinzas….
Ufff que va! Responde, eso llegará poco a poco…
Pero vamos a ver hombre, que una ya tiene una edad, que ya no digo que se me pase el arroz, se me pasa la paella y Valencia al completo!
Pero bueno, llegados a este punto, yo ya quería llorar. Miré al cielo y dije: qué te he hecho yo? Por qué me mandas a mí esto? Si nada dice bien cuánto te quiero como unos buenos azotes, algún tirón de pelos, una mordaza y si cuadra, y ya siendo muy quisquillosa, hasta una o dos órdenes!
Dónde ha quedado el placer de complacer! Y ahí me dice… en que me la chupas y me complaces!!
Tócate las narices, aunque iba de otras zonas el tema, o sea que tanto tiempo leyendo, tantos Dominantes, Amigos, sesiones y debates… todo para aprender, que el placer de complacer se reduce a… saber chuparla!
Desde luego, esta sumisa en paro, ha llegado a la conclusión, de que su mente no esta a la altura de tanta perversión.  Que lo que ella busca, es ya una utopía bedesemera, así que le di las buenas tardes, apuré mi café helado, casi tanto como mi animo y cerré el Messenger. Ya había tenido demasiada acción por un día.
Y hasta mi masoquismo tiene un límite.
Pero bueno, soy positiva. No ha sido hoy, pero malo será que no llegue otro día, otra persona y con suerte, alguien que me permita estar a la altura de sus perversiones o al menos, de sus prácticas bedesemeras…

Shadow Mind

Sumisas con CerebroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora